Lo que sucedió en torno a la localía de River en su predio de Ezeiza fue una vergüenza. River había solicitado hacía quince días disputar la Copa Liga Profesional en el River Camp y recién el día anterior al debut ante Banfield, la Liga Profesional no autorizó el predio y le exigió a River que busque un estadio en cuestión de horas. Desde la dirigencia del Millonario no presentaron ningún estadio y las autoridades decidieron postergar el partido para el próximo martes, y le dieron al Más Grande tiempo hasta las 20 horas del domingo para que asigne un estadio.

El jueves pasado, Claudio Tapia recorrió el River Camp junto a Rodolfo D’Onofrio y al salir brindó declaraciones a la prensa donde dijo que se podía jugar en el predio y que solamente restaban detalles administrativos. También, a lo largo de toda la semana se transmitió casi por cadena nacional el ingreso de las cabinas para la televisación y se fueron mostrando todos los avances del acondicionamiento del predio para que River sea local ahí. Pero la Liga Profesional esperó al día anterior para dar su negativa y lo hizo mediante un comunicado.

River espera un gesto de la AFA –aunque la Liga Profesional es quien organiza el campeonato de Primera División- para poder jugar en el River Camp, pero parece difícil que se cambie la decisión que ya se tomó. Entonces el Más Grande deberá considerar otros estadios para poder afrontar la competencia doméstica. En principio, al igual que en la Copa Libertadores, el estadio elegido sería el de Independiente. Hasta el momento River disputó dos encuentros en el Libertadores de América, fueron dos victorias, y el estado de campo de juego dejó satisfecho a Gallardo. Otra opción es la del José Amalfitani –estadio de Vélez- y la razón sería que también es terreno de juego le gusta al Muñeco. Y como última opción aparece el Tomás A. Ducó, de Huracán: el presidente Alejandro Nadur ya lo había ofrecido y el alquiler sería el más económico.

Juegue donde juegue, la Copa Liga Profesional empezó con el pie izquierdo, luego de más de siete meses de tiempo para organizar todo, en la primera fecha se tuvo que suspender un encuentro y no cualquiera, sino el de uno de los equipos que más rating y expectativa genera. La Liga decidió postergar el partido para el martes a las 21 horas, resta definir en qué estadio, aunque todo pareciera indicar que sería el de Independiente.