Una de las características positivas del fútbol sudamericano por sobre el europeo –con el cual no puede competir desde los nombres de los jugadores ni desde el plano económico- es la pasión con la que se vive en el estas latitudes el deporte más hermoso del mundo. Y para poder demostrarla es fundamental que los hinchas vuelvan a los estadios. En Argentina –y en varios países del continente- los hinchas todavía no pudieron volver a las tribunas, en otros –siempre respetando las medidas sanitarias que imponen que la capacidad es limitada- ya hubo casos de fanáticos que volvieron a las canchas.
En Brasil la decisión depende de cada Estado, ya hubo encuentros en Río de Janeiro con público en las tribunas y recién en Belo Horizonte, donde se encuentra el Mineirao –en el cual Atlético Mineiro juega como local- habilitó para que un 30% de las tribunas puedan recibir gente. Los hinchas del Galo agotaron las entradas para el duelo de vuelta por los cuartos de final de la Copa Libertadores ante River y por ende el estadio habrá unos 16 mil hinchas que alentarán a su equipo.
¿Puede pesar que haya público en las tribunas?
La realidad es que por lo general suelen hacerse más fuerte con su gente, pero a estos niveles de competencia y con la experiencia que tiene River en estas instancias poco importa que 16 mil personas alienten al rival. De hecho ya ocurrieron visitas a Brasil en los últimos tiempos en los que el Más Grande tuvo que revertir el resultado obtenido en la ida y con estadios llenos lo logró hacer, como por ejemplo ante Cruzeiro por los cuartos de la Libertadores de 2015 y ante Gremio en las semifinales de 2018.