Franco Armani nació en Casilda, Santa Fe el 16 de octubre de 1986 y desde chico siempre soñó con jugar en River, el club de sus amores. El Pulpo se trasladó a Buenos Aires e hizo las Inferiores en Estudiantes de La Plata pero jamás logró tener una oportunidad real de debutar en Primera ya que el puesto estaba cubierto. Más tarde pasó por Ferro pero nuevamente no encontró las chances, una vez de regreso en el Pincha le comunicaron que no lo tendrían en cuenta.
Por tal motivo encontró un lugar para tener continuidad en Deportivo Merlo. Felipe De La Riva lo pidió y el Pulpo aceptó sin dudar. Allí atajó varios partidos y para 2010 con 24 años decidió dar un salto en su carrera pero fue toda una apuesta. En ese año llegó a Atlético Nacional de Medellín, uno de los clubes más importantes de Colombia.
Armani llegó para pelear el puesto desde atrás, de hecho el titular por aquel entonces en el conjunto de Medellín era Gastón Pizzuti, ídolo del club. Tras dos años en los que atajó pocos partidos en el elenco Verde, la oportunidad le llegó a mediados de 2012 pero justamente en ese momento vivió uno de los momentos más dolorosos de su carrera al romperse los ligamentos cruzados.
En ese momento pensó en dejar el fútbol, ya tenía 26 años y no había logrado afianzarse en ningún equipo y cuando estaba para hacerlo le pasó una de las peores cosas que le puede pasar a un jugador de fútbol. Fue determinante para él tanto su esposa –Daniela Rendón- y la familia de ella para que Franco reconsidere su decisión y vuelva a intentarlo.
El año 2013 fue el del regreso a las canchas, lo fue haciendo de a poco y sin establecerse como titular pero ya en 2014 se adueñó del arco de Atlético Nacional y tuvo un brillante segundo semestre, su equipo alcanzó la final de la Copa Sudamericana y finalmente la perdió contra River en una serie que fue verdaderamente apasionante.
Ya afianzado totalmente en el arco de Atlético Nacional y siendo uno de los jugadores más queridos por el público, el 2016 alcanzó la gloria con el conjunto de Medellín. Los del Profe Rueda ganaron la Copa Libertadores con grandes figuras y una de ellas fue nada más y nada menos que Franco Armani.
Ya en 2017 su nombre empezó a sonar en River pero el conjunto colombiano no lo quería dejar salir, pero el fútbol siempre da revancha y Armani se puso firme –ante un club en el que lo quieren mucho- y para fines de ese año avisó que para 2018 quería jugar en River, el club de sus amores.
Luego de una despedida sin precedentes en Colombia, a estadio lleno, Franco Armani arribó a Buenos Aires para jugar en River y lógicamente para intentar llegar al Mundial de Rusia. En sus inicios demostró seguridad y su primer partido consagratorio fue ante Boca en la Supercopa de Mendoza, a partir de allí su nivel no paró de crecer y eso lo llevó a ser convocado por Jorge Sampaoli para el Mundial de 2018.
Los primeros dos partidos de aquel Mundial los atajó Wilfredo Caballero pero no logró dar seguridad y por eso Sampaoli confió en Armani para el último partido de la fase de grupos y también para los octavos de final ante Francia. Lamentablemente la Selección Argentina quedó afuera del Mundial en esa instancia, pero Armani viviría un 2018 impresionante.
Con River en ya metidos en los octavos de la Libertadores, el Pulpo fue determinante en todas las series: ante Racing se lució en el Cilindro en octavos, contra Independiente hizo lo propio en el Libertadores de América, ante Gremio en Brasil fue clave para darle el pase a la final al equipo y en la ida de la final le atajó un mano a mano a Bendetto sobre el final que valió más que un gol.
En Madrid ante Boca tuvo una muy buena actuación y terminó cumpliendo su sueño: ganar la Copa Libertadores con el club de sus amores y ante el rival de toda la vida. El éxito no hizo que Armani baje su rendimiento y de hecho siguió mejorando, el Pulpo se afianzó como el mejor arquero del continente y eso lo llevó a ser considerado por Lionel Scaloni que lo siguió convocando siempre, formó parte de la Copa América 2019 y de la de 2021.
Su segundo Mundial
Con actuaciones sobresalientes en River, Armani fue ratificado por Lionel Scaloni en la Selección Argentina y si bien desde 2021 es suplente de Emiliano Martínez, el Pulpo es un arquero más que probado para aparecer cuando se lo necesite. Para el Mundial de Qatar volvió a ser citado y por tal motivo es el único futbolista que estando en el fútbol argentino fue convocado a dos Mundiales en el Siglo XXI.