River quiere arrancar con el pie derecho la Copa Argentina y deberá sortear un duro obstáculo en su primer partido. Por los 32avos de final, el equipo de Martín Demichelis se medirá este miércoles con Racing de Córdoba en Santiago del Estero. El equipo cordobés ascendió a fin de año a la Primera Nacional desde el Federal A luego de haber salido primero y de a poco se está acomodando en la nueva categoría (ganó dos y perdió dos), por lo que promete darle pelea al Millo.

Entre los jugadores del equipo que conduce Carlos “Chiquito” Bossio, ex arquero de Lanús, se encuentra el delantero Franco Coronel, uno de los refuerzos del último mercado de pases y que ya marcó un gol ante Atlético Rafaela. Nacido en la ciudad de Ramallo y depasado en Independiente Rivadavia, Olimpo y Defensores de Villa Ramallo,entre otros, el mediapunta de 29 años vivirá el encuentro en el Estadio Madre de Ciudades de una manera muy especial ya que es hincha y fanático de River.

“Soy hincha desde chiquito. Toda mi familia, mis abuelos, todos son de River”, le contó en exclusiva a La Página Millonaria, junto con la revelación de una anécdota que marca su fanatismo por el Más Grande: “En 2002 pasamos por elMonumental para conocer y mi papá, de cara dura, preguntó si nos dejaban entrar. No eramos socios ni nada, solo hinchas, y un empleado de seguridad que mandóDiosnos dejó pasar“.

Ese día estaba el plantel entrenando ahí y cuando salieron me pude sacar fotos con todos, algo que noimaginábamos y estágrabado en mi memoria como si fuera hoy. Tengo fotos con todos los jugadores de ese plantel“, cerró con el recuerdo.

Aquel equipo era comandado por Ramón Díaz y Coronel, que en ese entonces solo había soplado 9 velitas, tiene fotos con él y con varias figuras más como el Burrito Ortega, Andrés D’Alessandro y Eduardo Coudet, entre otros. En ese equipo también estaba Martín Demichelis, actual técnico del Millo, y Franco cree recordar haberse sacado una foto con él, aunque lamentablemente en su casa no quedó registro fotográfico del momento.

Coronel, con la pelota en los pies, junto a su papá y al Cabezón D’Alessandro

No soy de pedir las camisetas, me da vergüenza, pero si me gustaría tener la de Maidana, Enzo Pérez o Nacho Fernández“, añadió sobre la chance de intercambiar casacas una vez terminado el encuentro. Sobre cómo imagina que puede darse el partido ante un rival de semejante jerarquía, el atacante concluyó: “Tenemos que hacer lo que venimos haciendo en el torneo y ser ordenados para estar siempre en partido“.

Junto al Chaco Coudet, allá por el año 2003 y con solo 9 años.