River realizó un buen primer tiempo en Tucumán. Asumió el protagonismo, intentó salir jugando pese a que la cancha estuvo rápida y a la vez pesada por dos motivos: las intensas lluvias que cayeron en los últimos días y el pasto alto.

¿El equipo de Ricardo Zielinski? Optó por cederlela pelota al Millo y esperarlo, aunque también intentó buscar faltas cerca del área de Franco Armanipara tratar de aprovechar algún que otro tiro libre.

En el comienzo del encuentro, cuando transcurrían apenas 4 minutos, Ignacio Scoccoquedó mano a mano conCristian LucchettiyMathías Aberoterminó agarrando a Nacho de la camiseta. El árbitro Diego Abal dijo “siga, siga” y decidió no cobrar un clarísimo penal. Verdaderamente insólito.

Recién alos 17 minutos se dio la primera llegadade Atlético Tucumán. A GervasioNúñez le quedó una pelota, Javier Pinola lo apuró y terminó definiendo muy desviado. Sin embargo, a los 20, La Banda logró ponerse en ventaja. ¿Cómo? Gracias a un gol de Cristian Ferreira: el pibeencontró un rebote en el área y metió un sablazo contra un palo. Llegó al quinto tanto en 17 partidos oficiales (653 minutos) con el manto sagrado.

A los 31 minutos,Ferreirapusounpase para Pratto y este rematócruzado. Pero la pelota se fue muy cerca del palo derecho de Lucchetti. Sí, fue una chance clarísima para River, que tranquilamente ya podía ir ganando por dos goles. Un rato después Mayada envió un centro desde la izquierda y el Oso cabeceó por encima del travesaño.

En la segunda mitad, el Decano salió a jugar de otra forma: con mucha insistencia, empuje ycon la obligación de ir a buscar el empate. Y esto incomodó demasiado al Más Grande, que perdió la pelota y dejó de hacer pie en Tucumán.

A pesar de que Marcelo Gallardo metió mano en el banco de suplentes (puso a Quintero, Ponzio y Fernández en los lugares de Scocco, Pérez y Ferreira respectivamente), El Más Grande nunca pudo generar peligro en el arco del elenco de Zielinski.

Para colmo, el Decano mereció conseguir el empate. Sobre todo en el final del encuentro: a los 84, Rodrigo Aliendrohizouna chilena que increíblemente se fue afuera. Luego, dicho delantero cabeceó y Armanitapó muy bien abajo. Y en la última jugada del duelo, Mathías Aberometió un cabezazo y Armanirespondió con mucha seguridad.

Riversufrió demasiado en el complemento, jugó un buen primer tiempo y un complemento para el olvido, pero logró quedarse con una victoria fundamental para seguir en la lucha por clasificar a la Copa Libertadores 2020.

¡A cambiar el chip y pensar en el choque del miércoles frente a Palestino!