Besos, abrazos, brazos en alto, sonrisas, banderas agitándose, bombos sonando, fotos y selfies por doquier. El Estadio Monumental vivió otra noche inolvidable con una consagración, la primera en el ciclo de Martín Demichelis al mando de River. Insólitamente no hubo premiación por parte de la Liga Profesional, pero el plantel del Millonario, sus familias y los hinchas se las arreglaron para hacer su fiesta.

Agustín Palavecino ya sabe lo que es ser campeón con River. Lo consiguió en 2021, su mejor año con el Manto Sagrado, y repitió la formula en este 2023 donde no le tocó tener demasiado protagonismo y su nivel estuvo lejos del mostrado en sus primeros meses en Nuñez. Más allá de ese análisis, la felicidad por un nuevo título lo invadió, tanto a él como a todos sus compañeros.

Antes de que se retiraran los últimos hinchas del Monumental, varios de ellos se agolparon en la San Martín Baja Inferior para tratar de sacarse fotos con los jugadores que iban pasando por allí. Pala frenó, se tomó alguna selfies y un pequeño fanático le pidió casi a los gritos (y de manera muy educada) si podía regalarle su short.

Pala, Pala, ya tengo tu camiseta y me falta tu short. Por favor Pala. Te amo“, le dijo el niño. El mediocampista obviamente cumplió con el pedido, se sacó su pantalón y se lo obsequió, no sin antes darle un fuerte abrazo. Gestos que emocionan y que tambien explican por qué River es campeón.