El partido entre River y Fortaleza en Brasil fue para el infarto. Los dos equipos salieron con la única intención de atacar y por eso la intensidad reinó durante casi 90 minutos, a tal punto de que el Millonario no pudo parar la pelota casi nunca y el mediocampo fue una autopista. Más allá de ese espectáculo para los neutrales, los dirigidos por Gallardo terminaron sufriendo porque se desordenaron atrás y en ningún momento pudieron serenarse, por eso Fortaleza atacó más y mejor a espaldas de toda la línea de defensores, sobre todo por el costado de Andrés Herrera que estuvo muy flojo en los mano a mano y de David Martinez, que mostró un bajo nivel.
Por suerte para River, apareció la figura de Franco Armani bajo los tres palos para evitar la catástrofe. Con el partido 1-1, el Pulpo salvó en reiteradas ocasiones su valla y mantuvo con vida al equipo, que casi nunca pudo encontrarle la vuelta al partido en defensa y dejó muchos espacios que los jugadores del equipo brasileño aprovecharon. Después de algunos partidos en los que fue criticado, el oriundo de Casilda volvió a responder con atajadas espectaculares en momentos claves del primer tiempo y también del segundo.
En el complemento, lejos de achicarse, el Pulpo volvió a imponerse y dejó en claro que fue por escándalo el mejor jugador del partido. A los 70′, cuando River empezaba a quedarse físicamente, el arquero estuvo atento para salir a tiempo y cortar una jugada de peligro que se había iniciado a espaldas de Casco con un pase filtrado. Por si faltaba algo, Armani también estuvo seguro con los pies y no sufrió ningún sobresalto en salida. Redondeó un partido brillante y fue el sostén de River los 90 minutos.
