Hernán Crespo provocó tristeza y sorpresa a la vez el 29 de febrero pasado, cuando logró arrebatarle un empate a River como técnico de Defensa y Justicia. Ese 1-1 en el estadio Monumental tuvo mucha injerencia en que la vuelta olímpica no pudiera darse en Tucumán.
Con un planteo táctico muy inteligente para anular a Enzo Pérez e Ignacio Fernández, claves en el circuito que pretende Marcelo Gallardo, Crespo exhibió sus conocimientos y proyección. Ya había ofrecido algunas muestras cuando Banfield igualó 1-1 con el Millonario un año antes, en zona sur.
Aunque ve al Muñeco con una larga estadía en Núñez, Crespo desea reunir requisitos a futuro: “Respeto mucho a Gallardo, ojalá se quede para siempre. Ahora quiero tratar de hacer los méritos suficientes para que el día de mañana los dirigentes se fijen en mí”.
Tras alejarse en 1996 como campeón de la Copa Libertadores, Valdanito nunca más tuvo la chance de defender los colores del Millonario. “Sería hermoso volver a representar a River, caminar los pasillos del Monumental, volver a ese vestuario que tantas alegrías me dio con River y la Selección”, manifestó.
Además, en diálogo con Goal, Crespo resaltó al manager del club, Enzo Francescoli: “Siempre fue muy respetuoso. Lo fue con nosotros como compañeros en el vestuario: luchaba por nuestras cosas, siempre fue así. Es una bendición que esté en el futbol con poder de decisión“.
El ex delantero de Rivertambién se refirió a que el ídolo uruguayo no haya sido entrenador: “El que quiere ser técnico tiene una especie de locura sana de vivir ese palo y palo del día a día. Se vive bajo una adrenalina diferente a la que tiene un dirigente, nosotros cuidamos nuestro trabajo día a día”.
