Los días pasan, el 30 de junio se acerca y la situación contractual de Rafael Santos Borré no termina de resolverse. El delantero colombiano termina su contrato con River en poco menos de un mes y todos los caminos conducen a que va a quedar libre debido a que el Millonario no dispone del dinero para comprar un 25% más de su ficha y así poder extender su contrato -lo establece una cláusula pactada con el Atlético de Madrid al momento que se hizo su transferencia-. A pesar de este panorama poco alentador, aún hay chances de que Borré se quede en Nuñez.
El conjunto español, por el momento dueño del otro 50% del pase de Borré, no está muy interesado en sumarlo al plantel el próximo semestre. El Cholo Simeone cuenta con varios delanteros y no necesita uno más. Ahí es donde River planea aparecer en acción: la idea es, una vez que quede en libertad contractual, sentarse a negociar nuevamente con el colombiano y ofrecerle un contrato con una mejora salarial significativa y una cláusula de salida para dejarle dínero al club en caso de que lo vengan a buscar desde el exterior.
Borré sigue sumando interesados
Si bien todavía no tiene ofertas concretas, los sondeos y los llamados por el colombiano no cesan. Después de haber estado cerca de Palmeiras y Gremio, durante esta primera parte del año también estuvo en el radar del Celta de Vigo y el San Pablo de Brasil, que luego desistieron por el costo que iba a significar contratarlo. Además,en las últimas semanas también surgió el interés del Watford de Inglaterra, recientemente ascendido a la Premier League y club por el cual ya pasaron algunos argentinos -Roberto Pereyra, Mauro Zárate, entre otros-.
Cabe recordar que el Millonario desembolsó 3.000.000 de euros en agosto de 2017 para comprar el 50% del pase del ex atacante de Deportivo Cali. Para poder renovar su contrato, el Atlético de Madrid estipuló una cláusula de compra de 3.500.000 euros por un 25% más del pase. De haber tenido el dinero, River seguramente la hubiese ejecutado, pero dada la delicada situación económica del país, no parece tener otra opción que dejarlo libre y volver a negociar en julio.