La transferencia definitiva de Gio al Genoa sigue causando ruido, debido a que River vendió el 35% restante sin haber puesto una opción de compra que no le diera alternativa a rechazar una oferta inmediata. El tema generó debate en reunión de Comisión Directiva. ¿Acierto o error?

El número final impacta, 5.100.000 de euros. No resiste discusión cuando se trata de un Giovanni Simeone con apenas cuatro goles en 33 partidos oficiales vistiendo el manto sagrado. Si bien es cierto que podría haber tenido mayores chances, el préstamo en Banfield le sentó bien: 12 tantos en 35 presentaciones formales. La estrategia de River fue sumarlo al plantel cuando regresó, aunque correría desde atrás en la consideración de Marcelo Gallardo, para que su valor se mantuviera en alza.

Sin embargo, hay varios factores de análisis en la venta del 100% del Cholito. Es que la primera operación al Genoa fue 3.000.000 de euros por el 65%, una cifra satisfactoria por donde se la mire. Y, a fuerza de goles, el delantero justificó enseguida la inversión del club italiano. Finalizó el 2016 con 7 gritos en 17 presentaciones. A River tampoco le venía nada mal la explosión del atacante de 21 años, sabiendo que a futuro podría recibir una buena suma de dinero.

Mientras Milan ya depositó su atención en Simeone, River vendió el 35% restante del jugador en 2.100.000 euros. Nuevamente un monto razonable a la hora de analizar su ciclo en el Millonario e incluso en el Taladro. Pero también puede ser un error a futuro, y acá depende de la evaluación que cada uno realice: si uno piensa en este momento de Gio, suena a equivocación enorme. Aunque es imposible dejar de lado que una racha goleadora sin continuidad luego haría desperdiciar la oportunidad de sacarle réditos.

A River ya le salió mal por lo menos dos veces la espera: ocurrió con Rogelio Funes Mori, que en su momento de mayor proyección no fue transferido. Lo propio sucedió, aunque como si fuera una suerte de caída libre, con el colombiano Eder Álvarez Balanta. Entonces, haciendo ese análisis, no es descabellado haber vendido el 35% restante de Simeone. Pese a ello, inexorablemente surge el interrogante, ¿era necesario apurarse tanto en vez de especular un poco con la situación?

Ayer, durante la primera reunión de Comisión Directiva en el año, el caso Simeone generó debate. Cuando el asunto fue revisado, surgieron diferentes focos de conversación. Además de la inevitable pregunta sobre el 35% -jamás existió opción de compra a respecto, es decir que River podía negociarlo en el monto que deseara- y la respuesta de una necesidad financiera que expuso el oficialismo frente a la pregunta de la minoría, el otro tema que hizo ruido fue el pago de una retribución a un intermediario.

¿La respuesta? No hubo negociación directa de club a club entre el Millonario y Genoa (según la dirigencia de la institución de Núñez, la entidad italiana se negó), por eso una persona intervino en la transacción. Por lo pronto, el pase de Gio dejó una polémica abierta. Y la sensación latente es que tienen tanta razón aquellos que piensan que fue un acierto, basándose en los antecedentes, como quienes consideran que se podría haber aguantado el 35% restante para conseguir más ganancia. El tiempo dirá…

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