"Me gustaría dirigir en Europa, pero no tengo ningún tipo de apuro"

El Muñeco tiene la cabeza puesta en River, aunque no escondió sus ganas de trabajar del otro lado del Atlántico en un futuro. La confianza para Batalla, la situación de los lesionados, el Superclásico de verano y la posibilidad de dirigir a otro equipo argentino.

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Si se quedó es para involucrarse. Lo dice y lo repite en cada ocasión. “Hoy mi cabeza y mi espíritu están acá”, asegura el Muñeco. Su continuidad fue un verdadero alivio para toda la gente de River. Pero aunque no quepan dudas de que hay Gallardo al menos por un año más, el DT, como cualquier otra persona, se permite imaginar su futuro profesional: “Me gustaría dirigir en Europa, como a cualquier entrenador o jugador de fútbol que crea en su evolución. Pero no me apuro para nada. El día que decida dar ese paso, me gustaría hacerlo con convicción. Hoy no tengo ningún tipo de apuro y ni me desespero porque sé que no va a haber muchos lugares en los que me pueda sentir tan bien y tan querido y que me den las libertades y las posibilidades de trabajo como acá en River. Hoy estoy feliz”.

El día que decida ir a Europa, me gustaría hacerlo con convicción

“Hoy nuestro club es una especie de oasis en el fútbol argentino. Quizás algún que otro club esté en las mismas condiciones, pero después nuestra situación no refleja lo que es el fútbol argentino. Yo considero que estoy en el lugar que me hace feliz porque sé que tenemos todavía mucho por generar, no solo desde lo futbolístico, sino también del desarrollo de bases, apostando nuevamente fuerte a las divisiones inferiores que son el futuro del club, tratar de transmitirle valores a esos jóvenes jugadores que van creciendo. Que sientan una identificación con esta camiseta, que se involucren, sabiendo que no solo tienen que jugar bien al fútbol sino que también tienen que ser buenas personas. Creo que hay un montón de gente que me acompaña y que está trabajando a la par para que se puedan seguir desarrollando cosas parecidas y eso es gratificante también”, agregó en este sentido en diálogo con TyC Sports.

Me siento muy identificado con River

Al ser comparado con Labruna y Ramón Díaz, entrenadores que ganaron todo con River y que también dirigieron otros equipos argentinos, el Muñeco no descartó esa posibilidad y la comparó con lo sucedido en su etapa en Uruguay: “No lo podría decir hoy en día. Esta es una carrera en la que yo recién comienzo. Tengo dos años y medio en River, un año en Nacional. Son tres años y medio y creo que todavía tengo muchísimo por delante. Uno nunca sabe lo que puede llegar a pasar el día de mañana. Hoy se me ve como una persona muy identificada dentro del seno riverplatense y yo también siento lo mismo. Pero cuando me tocó arrancar la carrera de técnico lo hice en Nacional, donde tampoco había tenido ninguna historia relacionada y sin embargo tuve la suerte de que me haya ido bien y que la gente de Nacional me demostrara su afecto. Entonces uno nunca sabe lo que puede pasar. Yo no pensé que iba a terminar mi carrera de futbolista en Nacional, pero se dio así y encontré un lugar increíble también para poder despedirme del fútbol y también un gran lugar para comenzar mi etapa como entrenador. Nunca se sabe lo que puede llegar a pasar”.

¿Por qué River se hizo fuerte en las series de eliminación directa? “No creo que sea un solo factor. Cada objetivo que nos pusimos hemos tratado de por lo menos estar en la disputa. A eso voy a todos los torneos internacionales que hemos tenido la suerte de jugar y que muchos de ellos hemos ganado, y otros no. Puede ser que pase por una cuestión de mensaje. Cuando uno comunica y los futbolistas toman el compromiso, se suele hacer muy fuerte, y por ahí dejamos de vista algunas otras cosas, que pasa por lo inconsciente. Este semestre los objetivos fueron la Recopa y la Copa Argentina y se marcaron tan fuerte que dejamos de lado de forma inconsciente el torneo local”.

Bancó a Batalla, aunque aclaró: “Yo no le puedo asegurar el puesto a nadie”

El DT también se refirió a a Augusto Batalla, cuestionado en los últimos partidos: “Batalla va a seguir siendo el arquero de River, por supuesto. Va a tener el respaldo que merece un chico de 20 años que recién está haciendo sus primeros pasos. Después va a tener que competir, porque de eso se trata. Yo no le puedo asegurar el puesto nadie. Sí le puedo transmitir confianza y tranquilidad, pero después es una competencia permanente. Y creo que a todos los jugadores les gusta sentirla. Batalla sigue siendo mi arquero, pero después va a tener que competir con Bologna. Y en esa sana competencia, el que este mejor, jugará. Arrancará jugando Batalla, seguramente”.

Gallardo espera contar con Lollo, Larrondo y Casco en el corto plazo: “Esperamos que en esta semana de “reeducación” para ellos puedan seguir evolucionando y que ya a partir de febrero esten trabajando con normalidad con el grupo”.

¿Por qué pueden ser contraproducentes los superclásicos de verano? “En época de preparación, donde vos tenés que focalizarte justamente en eso, en la preparación, tenés partidos que son amistosos pero al mismo tiempo tienen un alto grado de sobrecarga, de intensidad, que hacen que te desenfoques de tu objetivo principal. A mi me gusta tener tiempo de poder trabajar antes de jugar un partido, por más que sea amistoso. Porque los partidos esos los querés ganar, te preparás mentalmente para jugar con una intensidad muy alta. Y por ahí no estás todavía, justamente porque estás en una etapa de preparación”.

Por último, hizo una mención a Leonel Vangioni, hoy prácticamente colgado en Italia: “Desconozco cuál es la situación interna de Vangioni en el Milan ni por qué no ha podido jugar. Sí que es un pecado que un jugador que era muy valioso para nosotros no tenga minutos”.

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