El parte médico oficial del Santos FC que emitió la semana pasada asustó a propios y extraños. Luego de someter a los futbolistas a una serie de estudios cardiológicos, el mediocampista uruguayo Carlos Sánchez había arrojado algunas alteraciones coronarias que llevaron a los profesionales del club brasilero a tomar una drástica decisión: separaron al ex River de los entrenamientos, le indicaron reposo absoluto y le programaron más análisis para indagar sobre el problema detectado.
Unos días después, el ex volante millonario se sometió a una serie de estudos más complejos y minuciosos. Acompañado por el cuerpo médico del Santos, Carlos Sánchez se presentó en el Hospital Albert Einstein en busca de algunas precisiones sobre su futuro. Temía que un cuadro coronario pusiera fin a su carrera. Sin embargo, los resultados arrojaron la mejor noticia: los médicos no encontraron ninguna alteración de gravedad que le impida entrenar y competir a la par de sus compañeros.
El uruguayo celebró la buena noticia y se reintegró a las prácticas con el Santos FC, pero su futuro podría cambiar de rumbo en las próximas semanas. El futbolista de 38 años recibió una propuesta de Peñarol y no vería con malos ojos regresar a su país para ponerle un cierre a su etapa como jugador profesional. Por lo pronto, su salud ya le dio buenas señales y seguirá jugando un tiempo más, en Brasil, en Uruguay o en donde dicte su corazón, que está más sano que nunca.
