El brote de covid que apareció en el seno del plantel millonario en el inicio de la semana significó un dolor de cabeza, pero al mismo tiempo una buena oportunidad para aquellos que estaban esperando su chance. Es el caso de Ezequiel Centurión, que hace unos días atrás tuvo la chance de debutar de manera oficial en el arco del Más Grande en el encuentro ante Platense por la fecha 14 de la Copa de la Liga Profesional. Un partido que dejó un sabor agridulce porque el gol del Calamar llegó luego de una desatención en la salida desde el fondo.

En esta oportunidad, la ausencia obligada de Franco Armani por coronavirus le permitió a Centurión cumplir un nuevo sueño: debutar en un certamen internacional. En su primer encuentro en Copa Libertadores, el arquero oriundo de Cipolletti respondió de buena manera y logró su objetivo personal: culminar el encuentro ante Colo Colo con el arco en cero.

 

Más allá de la aplastante victoria de River y de la superioridad que mostró el equipo del Muñeco en el segundo tiempo, el joven guardametas tuvo que intervenir a los 31 minutos del complemento, en una de las pocas llegadas que tuvo el elenco chileno en ese tramo del partido. Solari quedó mano a mano con el Uno millonario y definió por encima de su cuerpo, pero el balón dio en el travesaño y le quedó servido a Lucero para convertir de cabeza. Sin embargo, el arquero del Más Grande se recompuso y alcanzó a despejar el balón con una volada espectacular.

Ezequiel Centurión despertó los aplausos de los hinchas que colmaron las tribunas del Monumental y se llevó la primera aprobación de un público siempre exigente. Más allá de la atajada puntual ante Lucero, siempre brindó seguridad y estuvo atento para anticipar las jugadas en algunos contragolpes de la visita. Coronó así una buena presentanción en el plano internacional y demostró que el puesto está bien cubierto.