Lucho hizo hincapié en la necesidad de aportarle sus condiciones al plantel que conduce Gallardo, sabiendo que es fundamental el hambre de gloria en un River muy competitivo.
Arribó desde Qatar. Luego de una década fuera del club, Luis González retornó al Más Grande para lograr lo que no pudo por muy poco en su etapa anterior: ganar la Copa Libertadores de América, tras haber llegado a semifinales en el 2004 y 2005, frente a Boca y el San Pablo, respectivamente.
“Venimos acá para intentar ayudar, para sumar y adaptarnos al grupo lo más rápido posible”, resumió el volante ofensivo, procedente de Al-Rayyan, apenas tomó el micrófono en la conferencia de prensa que los refuerzos, Marcelo Gallardo y Rodolfo D’Onofrio brindaron al mediodía, en el Museo River.
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En sintonía con Saviola, Lucho dejó en claro que la destreza física seguramente estará por debajo que en su ciclo anterior. “Comparto con Javi. Obviamente no somos los mismos que cuando nos fuimos porque estamos más viejos, pero la ilusión, la ambición, las ganas y el disfrutar cada entrenamiento es el mismo”.
Por lo tanto, la premisa de González es acoplarse de la mejor manera posible al plantel y brindar su repertorio cada vez que el Muñeco lo necesite. ¿El deseo? “Intentar estar a la altura del gran grupo de trabajo que hay y, cuando el técnico lo requiera y me necesite, poder aportar lo que pueda”, analizó.
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