En un principio no resultó extraño el cambio que hizo Gallardo, el ingreso de Bruno Zuculini por Enzo Pérez se entendía ya que el volante mendocino acumulaba muchos minutos jugados desde el regreso del fútbol y además solamente quedaban cinco minutos en los cuales Zuculini podía aportar un poco más a la contención al formar un doble cinco con Leonardo Ponzio. Pero las alarmas se encendieron cuando Pérez se acercó al banco de suplentes y se tomó el isquiotibial derecho, lo que sembró preocupación en el cuerpo técnico.
Existe la posibilidad que solamente haya sido una fatiga muscular y nada más, en caso de ser así, el mendocino no se perdería ningún encuentro, ya que es una pieza fundamental para Gallardo. Pero de ser necesario la realización de estudios y de constatarse una lesión, el volante central podría perderse varios partidos, entre ellos los correspondientes a los octavos de final de la Copa Libertadores ante Atlético Paranaense. Las lesiones musculares suelen demandar entre dos y tres semanas de recuperación y los duelos del Más Grande ante el conjunto brasilero son el 24 de noviembre y el 1 de diciembre.
Enzo Pérez cumplió un partido correcto ante Godoy Cruz por la tercera fecha de la Copa Liga Profesional, si bien se desempeñó en dos posiciones diferentes, supo acomodarse y culminó un partido correcto. Se lo notó un poco más impreciso que en otras oportunidades y de hecho una falla suya pudo costarle caro al Más Grande –Bologna lo salvó de manera magistral- finalmente Pérez estuvo mayormente acertado ante su ex club. Enzo jugó el primer tiempo como único volante central, cuando el equipo atacaba él se metía entre los centrales, mientras que en el segundo tiempo fue Ponzio el que realizó esa tarea y el ex Valencia se soltó un poco y jugó más adelantado.