River jugó un segundo tiempo realmente muy bueno y por eso logró su tercer triunfo consecutivo en este campeonato que le permite acercarse a la Copa Libertadores del 2025 y mantener alguna expectativa en la tabla de posiciones esperando que Vélez pueda dejar puntos en las fechas que quedan. Volvió a tener poder de gol. Entró una y entraron todas. Convirtió de a tres nuevamente como en los partidos frente a Banfield e Instituto. Pudieron ser 6 o 7. El equipo mostró esa diferencia de jerarquía que se debe tener ante un rival flojisimo.
¿Qué hace Barracas en Primera División?
En un fútbol argentino serio y con descensos, Barracas Central no debería estar jugando en Primera División. Son conocidos los motivos por los cuales tuvo tanto éxito en los torneos de ascenso que le permitieron acceder a la máxima categoría. Los beneficios permanentes que viene recibiendo durante los últimos siete años permiten que un club con estructura, historia y nivel de Primera C pueda estar jugando de manera oficial y por los puntos en el Estadio Monumental ante el equipo mas importante de la Argentina.
Por eso se disfrutan un poco mas estos triunfos. Hay deseos de ver una mejor Liga. Más competitiva y sin fallos raros. Viendo a River ser tan superior y ganar con tanto margen es una manera de hacer justicia por mano propia en un ámbito donde habitualmente sucede todo lo contrario.
Gallardo volvió a dar en la tecla con los cambios
Volviendo al partido. Fue bueno y para destacar lo realizado por el equipo. El contraste entre una etapa y la otra tiene que ver con los goles. Y con los cambios realizados por Marcelo Gallardo que funcionaron a la perfección. En la parte inicial, sin jugar en gran nivel, River mereció irse al vestuario ganando. La falta de área y definición hicieron que eso no ocurra. El 0 a 0 no correspondía a lo que se había visto en la cancha pero sí era un resultado que describía que le estaba costando mucho trabajo al equipo. Llegaba hasta al área pero no lastimaba. No había terminación.
Con Gonzalo Martínez, Miguel Borja y Franco Mastantuono adentro la historia fue diferente. Tenía desequilibrio individual para adelante y una presencia mas fuerte en el área rival. Empezó a crecer el rendimiento, a fluir el juego y a concretar esa superioridad que había empezado a mostrar en los 45 minutos iniciales. Lo pasó por arriba. Le generó una situación de gol tras otra. Además de los jugadores que ingresaron, tambien empezaron a levantar Maxi Meza y Rodrigo Villagra.
Todo funcionó como Gallardo y el hincha pretende. Es cierto y real que el rival no es medida. Que los triunfos y rendimientos importantes tienen que darse ante adversarios de otra jerarquía. Que el partido que habia que ganar no se ganó. Somos conscientes de eso. No nos confundimos ni le damos un valor exagerado a esta racha de tres victorias. No es nuestro estilo festejar lo que no corresponde. Sin embargo es justo reconocer que el equipo mostró recuperación tras el golpazo de la Copa.
Dar la cara
En un momento de frustración, River muestra su mejor cara. En vez de hundirse tras la decepción internacional pudo sacar la cabeza en las malas. Ante la adversidad y un pensamiento pesimista sobre el futuro inmediato, el cuerpo técnico y los jugadores dieron la cara y parecen haber solucionado en estas tres fechas una clasificación a la Libertadores 2025 que en algún momento parecía complicarse. Es importante estar en la Copa del año que viene para tener revancha. El torneo ya parece algo más difícil. River se metió solo en este lio empatando tantos partidos. Ahora deberá seguir ganando y el tiempo dirá si alcanza o no.
Gallardo no se queda callado
Es para felicitar a Marcelo Gallardo por su declaración en la conferencia de prensa. El tipo puede evitar embarrarse y sin embargo dice lo que todos los hinchas sanos del fútbol quieren escuchar. Hay que hacer todo lo posible para tener un fútbol mejor. Es muy feo lo que estamos viendo. Torneos sin jerarquía, de 30 equipos, con descensos anulados y arbitrajes escandalosos.
La semana pasada a River con Banfield le buscaron de todas las formas posibles complicarle el partido. Hasta un juez de línea intencionalmente metió una pelota extra al campo de juego en una acción de ataque de River. Con Instituto, Andrés Merlos no quiso cobrar un penal claro tras una mano alevosa del jugador cordobés. Y con Barracas además de permitir el juego brusco y la pérdida recurrente de tiempo, al árbitro Fernando Echenique se le ocurrió que era una buena idea terminar el partido en el minuto 45 y no adicionar los 7 u 8 que correspondían. Tiempo suficiente para que el buen momento del equipo en ese tramo del encuentro pudiera conseguir un gol más en un torneo que incluye en su reglamento a la diferencia de gol como un aspecto determinante. Y todo esto sucedió sólo en las últimas 3 fechas.
Si nos ponemos a revisar para atrás encontraremos decisiones arbitrales grotescas donde la tendencia siempre es la misma. Hay dos equipos que corren con ventaja. El resto siempre es víctima de todo un sistema en el que la gente hace rato que ya no cree. No sólo el DT millonario fue claro en sus conceptos. También se expresó el ex presidente de River, Rodolfo D’Onofrio, en la semana lo había hecho el mandamas de Vélez, Fabián Berlanga y en estas horas se sumó el enojo sincero del Presidente de Estudiantes de La Plata, Juan Sebastián Veron dejando un mensaje a través de sus redes sociales. Ni hace falta mencionar el enojo mostrado por los jugadores de Sarmiento de Junín tras el llamativo fallo que le anuló un gol en su partido con Boca.
Árbitros que nunca están a la altura: dirigentes, cuidemos nuestro fútbol
Es un momento delicado del “Fútbol Campeón del Mundo” como repiten a viva voz algunos que ofician de voceros para que todo esté circo pueda continuar. Prohibido confundirse. Campeon del Mundo es el talento de Lionel Messi, las atajadas de Emiliano Martinez y la sabiduría táctica de Lionel Scaloni. Nada mas. Nuestro futbol contaminado y pobre esta lejos de serlo. El Monumental este domingo se expresó en contra de la AFA. 90 mil personas gritaron su bronca contenida. Ojalá que ese mensaje que baja de las tribunas como un reclamo sincero también lo escuche la dirigencia de River; que como el resto de sus pares de otros clubes, votó a favor de todo esto que tanta gente, representada por la voz firme y valiente de Gallardo, pide que se termine de una buena vez.