Van a pasar los años, las décadas y los siglos y los hinchas de River van a hablar de aquella final, la más importante de la historia. Un 9 de diciembre de 2018 se marcó un antes y un después en la historia del fútbol sudamericano, nunca antes una Copa Libertadores se había definido con un superclásico, probablemente el partido más importante del mundo a nivel clubes, por la rivalidad que existe entre ambos equipos. Javier Pinola fue uno de los privilegiados que disputó aquel encuentro y en una entrevista concedido a los Especiales de River Monumental que se emiten de lunes a viernes a las 23 horas por todas las redes sociales de La Página Millonaria se refirió al partido consagratorio.
Javier Pinola tenía 35 años en diciembre de 2018, estaba por cumplir 36 y había jugado 120 minutos de un partido lleno de tensión. Cuando el partido se moría y River ya lo ganaba 2 a 1, Armani rechazó, Juanfer erró el taco pero habilitó al Pity que se fue de cara a un arco vacío y selló el triunfo más importante de la historia del club. Javier Pinola acompañó toda esa corrida y así lo contó: “Se dio justo que Franco rechaza y veo que Juanfer había quedado mano a mano con Olaza y yo salí corriendo porque vi el espacio y le quería dar una opción, no lo vi al Pity que había salido para el otro lado. Juanfer se la jugó para el lado del Pity y después lo que todos vimos, una corrida tremenda que termina de cerrar el partido de una vez”.
“La camiseta de la final contra Boca está guardad con el pantalón, las medias, la medalla y no sé si tengo los botines, me parece que no”, contó el marcador central que se encuentra recuperándose de una lesión en su brazo derecho y además agregó: “La final contra Boca fue muy especial, cada momento vivido es lindo e importante pero obviamente por todo lo que rodeaba y significaba es muy especial”.
El recuerdo eterno
“Cada vez que hay fechas especiales de la Copa pasan muchos recuerdos, muchas cosas vividas, momentos entre nosotros que van a quedar en la mente de cada uno inmortalizados, tanto desde el día que se suspendieron los partidos, ese mes de diferencia que había mucha tensión, la cabeza estaba puesta en la definición, el viaje y cada mes que te lo recuerdan, porque todos los 9 te lo recuerdan igual y cada aniversario tal vez salen imágenes nuevas o puntos de vista de distintas cámaras en la cancha y ahí uno se pone a pensar y cae en la realidad, pero son muy cortos esos lapsos porque no te podés detener en eso y saber que siempre hay más cosas por lograr”, sostuvo Pinola a pura mentalidad ganadora.