Es muy difícil poner la cabeza en el partido de esta noche. Todo River atraviesa días especiales porque permanece en pie el sueño de ganarle la Copa Libertadores a Boca. Sin embargo, el presente obliga a pensar en el compromiso de hoy contra Gimnasia y Esgrima La Plata, por un lugar en la final de la Copa Argentina. A partir de las 21.10, el Millonario buscará llegar a la instancia decisiva por tercera edición consecutiva.

A pocas horas para el encuentro en el estadio José María Minella, el desafío de Marcelo Gallardo no sólo pasará por lo táctico y estratégico, sino también por lograr que sus dirigidos puedan concentrarse en el rival de turno. Resulta inevitable para el plantel enterarse de las chances que tiene Qatar como sede de la instancia decisiva del máximo certamen continental, pero también convive con la decisión que tomará la Unidad Disciplinaria de la Conmebol.

En ese contexto, a 17 días del último partido disputado (2-2 ante Boca), River se presentará en Mar del Plata con la ilusión de ganar para acceder a una nueva final. Para alcanzar ese objetivo cada protagonista deberá estar preciso para definir, fuerte para defender y, sobre todo, concentrado. Ahí está su reto, sabiendo que su próximo rival nuevamente será Gimnasia el próximo domingo, aunque en la Superliga.