River recuperó terreno con una formación alternativa. Tras perder 2-1 ante Vélez, hoy venció 2-0 a Gimnasia y Esgrima La Plata y consiguió tres puntos muy valiosos como visitante. La diferencia estuvo en las áreas porque Jorge Carrascal e Ignacio Scocco marcaron los goles -se abastecieron mutuamente-, mientras que Enrique Bologna le negó el gol a un Lobo que le agregó impericia a la definición.
Marcelo Gallardo cuidó jugadores pensando en la semifinal del próximo martes contra Boca. Es por eso que les dio rodaje a varios protagonistas que habitualmente son suplentes e incluso no suelen ir al banco de suplentes. El desarrollo del partido expuso esa problemática porque al equipo le costó hacer pie, sobre todo en la zona del medio campo.
Los volantes recurrieron a las infracciones en reiteradas ocasiones, permitiendo que Gimnasia pudiera inquietar mediante la pelota parada. Ese rubro le generó varios inconvenientes a River, al punto tal de que el Muñeco sacó a Elías López para poner al chileno Paulo Díaz con el propósito de fortalecer el juego aéreo.
Incómodo y sin circuito aceitado, River aprovechó sus chances. Carrascal abrió la cuenta con un derechazo luego de un pase de Scocco. La fórmula se repitió para el 2-0 definitivo. Recién después del segundo tanto hubo espacios para lastimar de contragolpe, pero la diferencia lograda alcanzó para obtener la victoria en el Bosque.
Ahora sí, llegó el momento de pensar en Boca. Gallardo y sus dirigidos deberán mentalizarse para mantenerse en la senda del éxito, con varios cambios en relación a hoy. ¿Llegarán Nicolás De La Cruz y Lucas Pratto? ¿Paulo Díaz o Javier Pinola? Los interrogantes ya están en marcha.