Tiene doce títulos oficiales en su haber como futbolista de River. El primero de ellos fue allá por el año 2008, cuando el joven Leonardo Ponzio levantaba el trofeo Clausura junto al capitán Ariel Ortega. El destino quiso que el León se marche a Zaragoza y regrese en 2012 para hacerle frente al peor momento de la historia de River.

De allí salió airoso, y años después consiguió una inmensidad de laureles entre los cuales se destacan las Libertadores de los años 2015 y 2018. Por eso, y teniendo en cuenta que está transitando por el último tramo de su carrera, el referente del Más Grande analizó su presente con palabras nostálgicas para el hincha.

"Me encuentro en un club en el que me siento muy cómodo y más no puedo pedir. Para estar, hay que estar de la mejor manera. La verdad que lo vengo diciendo hace bastante, desde que ganamos la primera Libertadores: al fútbol no le puedo pedir más nada, agradecimiento puro. Después lo que venga va a ser en consecuencia de lo que uno quiera seguir teniendo", explicó el volante central.

A su vez, el santafesino explicó cuál es el sostén del plantel para seguir manteniéndose en el alto rendimiento sin pensar en todo lo logrado: "Ahora tenemos un poco de relax en cuanto a lo mental, en lo físico no porque hay que prepararse. Tenés una etapa de relajación, nos pasó a principio de año. Hasta que entrás de nuevo en órbita, tenés que seguir ganando. Es parte de este fútbol. Dentro de todo, cuesta pero tenemos una persona que nos hace remarcar día a día que hay que estar siempre pensando en lo que viene. Esa persona es el entrenador y todo lo que surge atrás, en cuanto a los profes y mucha gente que está predispuesta".