Martín Demichelis asumió en River a fines de 2022 y desde ese entonces, se incorporaron 17 refuerzos. Algunos se integraron mejores que otros, y hasta supieron ser importantes. Pero en el balance general, son pocos los que logran por ahora tener un análisis positivo, y el gran problema es que ninguno se termina de asentar. Uno de los tantos motivos por los que el Millonario parece no tener rumbo.
En el primer mercado de pases llegaron Ignacio Fernández, Enzo Díaz, Matías Kranevitter y Salomón Rondón. El nivel de Nacho nunca alcanzó las expectativas, el lateral izquierdo tuvo un primer semestre de alto vuelo, pero lleva un año con un rendimiento realmente preocupante, el Colo es uno de los cuatro volantes centrales que llegó para quedarse con el puesto pero no lo hace, y el venezolano tuvo un paso sin pena ni gloria.
En el segundo arribaron Facundo Colidio, Manuel Lanzini, Gonzalo Martínez, Ramiro Funes Mori y Sebastián Boselli en lo que fue el mercado más ambicioso, con el objetivo de mejorar al plantel campeón de la LPF 2023 y pelear la Copa. Pero Manu y el Melli por el momento también decepcionaron, Boselli (más por decisión del DT que por rendimientos) fue otro de los que no se asentó, y el más parejo de todos quizás fue Colidio.
En el tercero parecía que la única cara nueva era Nicolás Fonseca, pero un mal comienzo de año obligó a salir a buscar a las apuradas a Agustín Sant’Anna y Rodrigo Villagra. El ex Defensa tuvo altibajos, y cuando ganó el puesto se lesionó, mientras que los dos mediocampistas son más chispazos de ilusión que otra cosa. Y en este último mercado de pases llegaron Ledesma, Gattoni, Carboni, Peña Biafore y Bareiro.
En definitiva, River tuvo mercados de pases ambiciosos, y en general, donde Demichelis puso el ojo, el Millo puso la bala y lo trajo. Sin embargo, de los 17 nombres exhibidos ninguno logra destacarse y sobresalir sobre el resto. De hecho, en un complicado 2024, el salvavidas es para Miguel Borja y Paulo Díaz, dos que ya estaban.
¿River vuelve a salir a las apuradas al mercado de pases?
Las dos primeras presentaciones dejaron aún más dudas que la derrota ante Riestra con la que el Más Grande le bajó la persiana al primer semestre. Salvo Peña, quien era del club, y Ledesma, que competirá con Armani, los primeros rendimientos de Gattoni y Bareiro no son muy promisorios. ¿Carboni? Todavía no tuvo la chance.
River está en un escenario en donde el plantel que tiene parece quedar corto, no tanto por cantidad sino más bien por calidad y por características, por niveles flojos, y por sobrepoblación en algunos sectores pero escasez en otros. En definitiva, el margen de error a la hora de incorporar es cada vez menor y Demichelis necesita las soluciones que no tiene, pero que él mismo no supo encontrar en los nombres que llegaron bajo su propia tutela.