24 de junio, cumpleaños número 36 de Lionel Andrés Messi, el mejor jugador del planeta tierra, y una propicia ocasión para repasar la historia detrás del “perdón” del número 10 a los hinchas de River en la final del Mundial de Clubes 2015. Hizo cientos de goles a lo largo de su carrera profesional, pero solo en uno levantó el brazo en señal de disculpas. Acá el por qué.
Lo que ocurrió es conocido por todos los hinchas del Millonario pero no viene mal un breve repaso. Después de sufrir para superar al Sanfrecce Hiroshima en las semifinales, el gol de Lucas Alario le permitió acceder a River a la final del Mundial de Clubes contra posíblemente el mejor Barcelona del siglo. El tridente Messi, Luis Suárez y Neymar estaba en la cúspide de su rendimiento.
La derrota 3-0 terminó siendo hasta previsible dado el nivel de aquel equipo dirigido por Pep Guardiola. Las calles en Japón y las tribunas el día de partido estuvieron repletas de hinchas de River que dejaron hasta lo que no tenían para cruzar el mundo y alentar al equipo de sus amores. Y fueron testigos del perdón de Messi.
Una imagen vale más que mil palabras.
El capitán de la Selección Argentina marcó el primer gol a los 36 minutos bajándola con la mano, algo que en ese entonces no fue advertido por el árbitro (no existía el VAR). Luego de festejar con sus compañeros, Messi levantó el brazo izquierdo, puso la palma al frente y le pidió perdón a los hinchas del Más Grande.
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Por qué Messi le pidió perdón a River
Hace algunos años, el propio protagonista se encargó de explicar en una entrevista con ESPN los motivos de semejante e inesperado gesto para con los 20 mil simpatizantes riverplatenses que estaban en las tribunas: “Lo hice porque mucha gente de River viajó, hizo mucho sacrificio, un gran esfuerzo por ese viaje. Tenían una ilusión muy grande. Y que me toque a mí, siendo argentino, sacarles la ilusión por hacer el primer gol… Fue raro, no sé, me salió así y pedí perdón“
“Como todos los partidos, como cada vez que llego a la cancha, yo quería ganar y ser campeón“, agregó. Quizás nunca sepamos si Messi es realmente hincha de River o no (que tiene un cariño especial no hay dudas), pero en su cumpleaños número 36 era imposible no destacar aquel gesto con la gente del Más Grande hace ocho años en el continente asiático.
