River es gigante, siempre lo fue y lo seguirá siendo. Es uno de los clubes más importantes del mundo y siempre se dice que el club por encima de cualquier nombre y eso es verdad. Pero también es verdad que desde que Marcelo Gallardo es director técnico del club River es todavía más grande. La cantidad de títulos que ganó, la manera de jugar que tuvieron y tienen sus equipos, la comunión con el hincha en un fútbol argentino que es tan histérico que hace que los técnicos no duren más de un par de meses en los equipos, el legado que está dejando es incalculable.

Marcelo Gallardo no tuvo un año sencillo en lo que respecta al armado del equipo en todo este 2021, pocas veces pudo repetir el equipo en dos fechas consecutivas y eso fue producto de varias razones: lesiones, contagios de Covid-19, futbolistas que no lo convencían, expulsiones o acumulación de tarjetas amarillas. Pero es destacable cómo jugó el equipo en líneas generales no solo en los últimos partidos de la Liga Profesional en la que River arrasó. De hecho el mérito es todavía mayor cuando de un semestre a otro hubo bajas sensibles como las de Gonzalo Montiel o Rafael Santos Borré, es que River tiene la impronta de Marcelo Gallardo y el equipo siempre va a intentar ser protagonista, salgan o no las cosas.

Gallardo y su futuro en River

El Muñeco habló con ESPN y respecto a su futuro dijo: "Voy a replantearme mi futuro en diciembre, ya le di todo al club. Se necesita estar al 100%". Luego agregó: "No sé cuándo lo voy a decidir. Más allá de la reflexión, va a ser una decisión muy difícil de tomar. No sé si va a ser la decisión más difícil de tomar, porque deportivamente pasamos por muchas situaciones, pero personalmente seguramente sea la más difícil de mi vida". Y para cerrar aseguró: "Mis hijos no me preguntan nada sobre mi futuro, por suerte solo me acompañan. Son muy respetuosos de mis decisiones. Es más, con mi familia no hablo de fútbol. Solo con mi equipo de trabajo por el cual siento un orgullo enorme de tenerlos al lado".

La importancia de los experimentados

El Muñeco dialogó con TNT Sports una vez que River se coronó campeón y dijo: “Esto es por todos, hay un grupo de jugadores con una calidad humana enorme, se prestan al laburo, a la exigencia, no le escapan al esfuerzo, es lo que somos, como trabajamos y hay un gran sentido de partencia. Venimos trabajando hace tiempo con estos jugadores y no es fácil mantenerse en una institución con una demanda tan grande. Muchos tienen altibajos pero vuelven a reponerse, naturalizan una idea y la hacen propia. Los más grandes –Milton, Poroto, Leo Ponzio, Pinola, Bologna- son los que muestran el camino a los más chicos. Es una felicidad y un orgullo que uno siente para el grupo de personas que uno gestiona y que podamos redondearlo así después de un año complicado. Es un año redondo”.

La posibilidad de ganar su primera liga Profesional

“Siempre uno quiere ganar, por momentos tuvimos la chance de ganar el torneo local, se nos escapó. Es muy dura la competencia en el fútbol argentino, en Sudamérica y a veces tuvimos que seleccionar momentos. No me arrepiento de nada de lo que hice. Nos quedamos afuera de la Libertadores y nos dio la posibilidad de enfocarnos en este torneo, no ligamos en un momento con las lesiones y volvimos a fluir. Volvimos a encarar nuevamente con fuerza cuando sentíamos que estábamos tambaleando. Terminamos de coronar un gran esfuerzo de todos porque nos repusimos a todas esas cosas”, afirmó el director técnico más ganador de la historia de River.

La felicidad de los hinchas y el orgullo por sus jugadores

Un entrenador tiene que gestionar a los futbolistas y a las personas y estas personas me dieron mucho y después te retribuyen mucho. Los hinchas merecían tener una alegría de final de año, volver a llenar al estadio después de mucho tiempo y hacerlo en un partido como el de hoy, de la manera en la que jugó el equipo, es un orgullo”, concluyó el Muñeco.