El millonario llegaba a Bolivia en búsqueda de mantener su buena racha de victorias y de arrancar de manera correcta la fase de grupos del torneo internacional. Teniendo en cuenta los antecedentes del club en tierras bolivianas, y la falta de un jugador de la talla de Nicolás De La Cruz por lesión, se sabía que no sería una labor fácil.

River salió al partido con un 4-3-1-2 y varios cambios. Volvía Mammana al 11 titular por González Pirez, Palavecino reemplazaba a De La Cruz en el medio y Solari-Herrera sorprendían desde el arranque por Nacho Fernández y Casco.

Con estas entradas, River buscaría ser protagonista en ese primer tiempo y generar peligro con alguna corrida de Paradela o Solari por los costados. Sin embargo, estos no pudieron interpretar bien sus funciones en cancha y se los vio muy incómodos.

Por su lado, el local planteaba un 4-2-3-1. Centrales estáticos, buscando que Beltrán no entre con comodidad en el área, laterales de diferentes roles y un medio de mucho juego. Isnaldo tendría libertad para atacar sin compañía de su lateral en el sector izquierdo, Chura buscaría asociarse con Ortega y arriba, un 9 pivot como Triverio. 

A pesar de River comenzar mejor el partido, The Strongest aprovechó varios errores defensivos y fue eficaz de cara al arco de Armani. Con el 3-0 en la espalda, el DT local decidió mutar a 4-5-1 en el segundo tiempo para solamente aguantar el empuje de River. Su medio se volvió más combativo y sus laterales no pasarían más allá de la mitad de cancha. Esto, para evitar desbordes de los atacantes millonarios.

Demichelis, en cambio, buscó primero cambiar funciones en el medio con Simón y Nacho por Enzo Pérez y Paradela. El 10 de River entraría con funciones diferentes a José, y se mostraría mucho más cómodo por detrás de los atacantes.

Luego, ya desesperado, mando a Barco a volantear por izquierda y al doble 9 de Borja-Rondón para buscar empujar algún centro, pero estos entraron a contramano y las pocas que tuvieron las desperdiciaron. 

Se repitieron errores del pasado

Uno de los errores que más se destacaron en el ciclo Demichelis, hasta el momento, fue la mala lectura de espacios defensivos. El triángulo De La Cruz-Enzo-Aliendro había solucionado esto. A falta del uruguayo, en La Paz Palavecino no cumplió bien este rol y su sector fue sobrepasado por este problema. Muchas chances llegaron de esa zona.

En torneo se salvó, en Copa no

Con Unión, la falta de eficacia fue lo único negativo del partido. Ya sea por mérito del arquero rival o por defecto en la definición, esto se volvió a destacar y se pagó muy caro. Otra vez, el equipo falló en el toque final y solo con un gol de penal se logró marcar.

Mammana y una floja vuelta

Frente a U. de Chile, ya había sido de lo más flojo. En La Paz, tuvo otro preocupante rendimiento. Perdió el 62% de los duelos 1vs1, erró varios pases largos y tuvo responsabilidad en dos goles. A pesar del buen momento de González Pirez, River necesita la mejor versión del central nacido en Merlo.

Paulo Díaz y su peor tarde en River

El central chileno tuvo varios errores con la camiseta de River, pero nunca se lo había visto tan errático. Además de ser partícipe importante en el segundo gol rival, dio solo el 30% de los pases largos bien y perdió el 70% de los duelos 1vs1. 

Enzo Pérez sufrió como nunca

El capitán de River padeció como ninguno el partido. Prácticamente no tuvo contacto positivo con la pelota, dando solamente 4 pases progresivos en 60 minutos jugados y recuperando solo 3 pelotas. Sintió mucho la falta de De la Cruz y el flojo rendimiento de Aliendro.

Beltrán, lo único positivo

El partido del delantero de River fue lo único rescatable. Muy aislado, pudo generar sus chances y patear de gran manera el penal que le hicieron a él mismo. Hoy por hoy, es fundamental en el 11 de Demichelis.