Uno de los secretos del éxito de River a lo largo de todos estos años fue la conformación de los diversos grupos que tuvieron a Marcelo Gallardo como cabeza. En este semestre se sumaron algunos jugadores –Enzo Fernández y Braian Romero- y también varios pibes que habían tenido un puñado de partidos en Primera entre fines de 2020 y el primer semestre de 2021 se afianzaron como parte del grupo. Se acoplaron a futbolistas que ya venían trabajando juntos y que tenían como referentes a Leonardo Ponzio, Jonatan Maidana, Javier Pinola, Germán Lux, Enrique Bologna, Franco Armani y Enzo Pérez.
Entre esos chicos aparece Felipe Peña Biafore, un volante central que por falta de oportunidades en su puesto natural comenzó a jugar como marcador central y lo hizo muy bien. El pibe de Pehuajó tuvo grandes rendimientos en la recta final de la Liga Profesional pero desafortunadamente un mal movimiento en una de las primeras jugadas ante Patronato –el pasado 7 de noviembre- generó que se rompa los ligamentos de su rodilla derecha. Peña se operó a los pocos días y se encuentra en plena recuperación. En la misma instancia está Enzo Pérez que el pasado domingo ante Platense su luxó el codo de su brazo izquierdo y estará varias semanas fuera de las canchas.
El mago Felipe
River derrotó a Racing por 4 a 0 y se coronó campeón de la Liga Profesional a falta de tres fechas para la finalización del torneo. Minutos antes del cierre del encuentro aquellos jugadores que integran el plantel profesional pero que no pudieron estar por diversas razones se acercaron al banco de suplentes a celebrar con sus compañeros. Entre ellos estuvieron Peña y Enzo Pérez. El cotillón para los festejos incluyó una galera, la corbata emblemática con la que Gallardo homenajeó a Labruna ante Boca y un bastón, el cual Peña utilizó como una suerte de varita mágica y en una historia de Instagram afirmó entre risas: “Olvidate, ya estás curado”, junto a un video en que se lo veía haciendo unos movimientos con el bastón ante la presencia del crack mendocino.