Quizás pasó algo desapercibido por los rendimientos sobresalientes que hubieron de mitad de cancha hacia adelante, pero en la goleada de River sobre Argentinos Juniors una de las mayores figuras fue Paulo Díaz, quien regresaba a la titularidad después de perderse los últimos tres partidos del equipo -dos por lesión y uno por estar convocado a la Selección de Chile-.
El chileno aportó la firmeza y seguridad que lo caracterizan durante los 90 minutos que estuvo en cancha y nunca mostró signos de que volvía de una lesión, sino que pareció un partido más y lo jugó con una soltura digna de aplausos, además de que volvió a compartir zaga con el compañero al que mejor conoce: David Martínez. Y obviamente su actuación se tradujo en números superlativos: despejó seis pelotas, ganó 4 de 5 duelos aéreos, tuvo un 84% en efectividad de pases y lanzó seis pelotas en largo que llegaron a un compañero.
El lujo que volvió locos a los hinchas de River
Uno de los sellos del River de Gallardo es jugar con la última línea de defensores adelantada varios metros y que los centrales tengan la capacidad e inteligencia para conducir en salida y sumarse a la generación de juego en ataque. Paulo Díaz comprende todo eso a la perfección y además le suma lujos para sacarse a los rivales encima.
En la previa de la jugada que terminó con un disparo de Enzo Fernández en el palo en el último suspiro del primer tiempo, Paulo hizo que los hinchas se levantaran a aplaudirlo cuando salió con pelota dominada hasta mitad de cancha y se liberó de volante de Argentinos que lo salió a marcar con una pisada y giro al estilo Zinedine Zidane para después darle un pase preciso de tres dedos a Simón que picaba por derecha. ¡Pinta de crack!
