River aplastó a Argentinos Juniors en el Estadio Monumental y sigue soñando en grande en la Liga Profesional. Le ganó 3 a 0 pero podría haberle hecho cinco o seis goles, producto de la voracidad y la intensidad con la que salió a jugar el partido, que en la previa se vivía como una final por el empate de Talleres de Córdoba, inmediato perseguidor. El Millo le sacó nueve puntos al segundo y esta noche encontró en Enzo Fernández a uno de sus baluartes en mitad de cancha.

El número 13 tuvo la difícil tarea de reemplazar a Nicolás De la Cruz -lesionado y sin fecha de regreso- y lo hizo de gran manera. "Se comió la cancha", habrá dicho algún hincha en la tribuna durante el partido. El surgido de las Inferiores se paró como volante interno e hizo de todo: recuperó, creo oportunidades, pisó el campo rival en reiteradas ocasiones y estrelló un zurdazo en el palo que hubiese sido uno de los mejores goles del año.

El hermoso gesto del volante con un hincha

Terminado el partido, los jugadores de River hicieron el habitual camino para irse al vestuario, encarando hacia la tribuna Sivori para subir por la escalera que conduce al vestuario y antes de bajar, un hincha con un bebé en brazos le pegó el grito a Enzo pidiéndole su camiseta y el mediocampista frenó, se sacó la remera y se la regaló. ¡Un hermoso mimo para los incondicionales!