Pocos jugadores en la historia de River pueden estar a la altura de Fernando Cavenaghi en lo que respecta el amor por la camiseta. El Torito se hizo ídolo de River no sól por sus goles fantásticos y decisivos, sino también por haber estado presente en las buenas y en las malas.

Y la final de Madrid ante el clásico rival fue para él un momento sublime, más allá que no pudo estar presente en el campo de juego. Porque lo vivió desde su costado pasional, ése que le acelera el corazón, y además pudo compartirlo con gente cercana y con todo el plantel de Marcelo Gallardo.

"Disfruté mucho como hincha la final, con un montón de amigos y excompañeros allá en Madrid. Y hasta con el cuerpo técnico y los jugadores cuando terminó el partido. Pero todo el logro es de ellos. La verdad que consiguieron algo único", sostuvo el Torito en diálogo con Fox Sports Radio.

Por otra parte, reconoció que la gente Xeneize siempre ha mostrado mucho respeto hacia él, pese a que nunca ocultó su fanatismo por el Más Grande. "El hincha de Boca me tiene mucho respeto en la calle, porque siempre fui respetuoso con ellos y nunca me gustó la polémica. El jugador que quiere ser respetado debe marcar el ejemplo dentro y fuera de la cancha. Porque vendehumo hemos visto un millón de jugadores que después quedaron en la nada", cerró.