Un gran líder, un capitán, un referente no solamente lo es dentro de la cancha o en el vestuario sino también en el trato que tiene para con los hinchas. Franco Armani además de ser el mejor arquero del fútbol argentino y de Sudamérica hace año, también es un ejemplo afuera de la cancha. Él más que nadie sabe de sacrificios, si su carrera estuvo a punto de terminar luego de no encontrar un arco donde adueñarse y también de sufrir una lesión que lo marginó de las canchas por meses.
Pero supo salir adelante y gracias a su perseverancia y trabajo logró cumplir sus sueños: jugar en el club de sus amores –y ser determinante para la conquista de títulos memorables como la Libertadores de 2018- y también representar a la Selección Argentina, además de hacerlo por amistosos, Eliminatorias y Copa América, también lo hizo en el Mundial de Rusia 2018 y todo indica que lo hará en Qatar 2022.
Armani ya había demostrado tener un carisma especial con los chicos cuando hace unas semanas lo visitó en el club un chico con un problema motriz y el Pulpo lo abrazó y jugó con él. En esta oportunidad volvió a demostrarlo con una chica que lo esperó en las afueras del Monumental tras su gran actuación ante Central Córdoba.
¿Cómo fue el emotivo encuentro?
El Pulpo salía del Monumental con su camioneta cuando vio que una nena junto a su padre lo esperaba afuera del Monumental, detrás de una reja. El arquero bajó sin dudarlo a saludar –él sabe que ese gesto suyo le va a dar una alegría inmensa- y la nena le pidió los guantes pero él le dijo que los deja en el club y le ofreció su short. La nena se emocionó mientras el Pulpo lo sacaba de su mochila, al dárselo la chica posó sonriente y casi se quedó sin palabras, aunque sobre el final dijo: “Me lo voy a guardar para toda la vida”.