La previa del encuentro ante Vélez por el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores contó en la previa con un invitado muy especial. No se trata de un ex jugador, un viejo compañero del plantel o alguna personalidad del ambiente artístico. En esta oportunidad, el gran protagonista fue Joaco, un niño de cinco años que tuvo la chance de conocer a sus ídolos y hasta jugar un rato al fútbol con ellos.
Joaco tiene una condición que lo acompañará de por vida: padece espina bífida. Por esta razón, en los próximos días se someterá a su novena intervención quirúrgica. Antes de someterse a la cirugía, le pidió a su familia un deseo: conocer a Franco Armani, su gran ídolo. Y a través de la Fundación River pudo concretar no sólo un encuentro con el Pulpo, sino también con todos los futbolistas del plantel profesional.
En la última práctica en Núñez antes de quedar concentrados para el encuentro ante el Fortín, los futbolistas se detuvieron para sacarse unas fotos con Joaco, firmar su camiseta y compartir un grato intercambio. El momento más emotivo se produjo con la llegada de Franco Armani, que le brindó un fuerte abrazo y le autografió sus guantes, además de su buzo de arquero con el 1 en la espalda. El niño lo desafió a un picadito y se llevó un recuerdo imborrable. Otro gesto enorme del plantel millonario, que sigue cumpliendo sueños dentro y fuera del campo de juego.
