La incertidumbre alrededor del regreso del fútbol cada vez es mayor. Algunas fechas estimativas se van acercando pero los números de infectados no acompañan la situación para que, al menos, vuelvan los entrenamientos de los clubes. Alberto Fernández, presidente de la Nación, se tomó un segundo para charlar específicamente de su charla con Gallardo y de la posibilidad de que River deba viajar a Brasil para enfrentar a Sao Paulo por Copa Libertadores.
“Lo primero que tenemos que entender es que estamos en una pandemia. Uno cruza la frontera, entra en Brasil y hay que ver la cantidad de focos infecciosos que existen en Brasil”, arrancó el presidente en charla con Radio Con Vos. Y agregó:“Yo me pregunto, a ese chico que siente eso ¿tenemos que exigirle que vaya a jugar un partido de fútbol al epicentro de la pandemia?Estoy contestando más como hincha de fútbol que otra cosa. Pero me parece que tenemos que ser muy, pero muy cuidadosos”.
“¿Tenemos que exigirle que vaya a jugar un partido de fútbol al epicentro de la pandemia?”, se preguntó el presidente.
Además, reafirmó que invitó al Muñeco a tener una conversación cara a cara:“Hace un tiempo lo invité a charlar a Gallardo, tengo un enorme respeto por él, me parece un hombre honorable, con una cabeza distinta en el fútbol”. Alberto Fernández sabe que el fútbol no es prioridad actualmente en el país y reveló una de las frases que le dijo Gallardo por teléfono. “Le dije que en el fútbol, sin público, son 22 personas jugando al aire libre en un campo de casi 10 mil metros cuadrados. ¿Cuál es el riesgo? Y me contestó ‘vos pensás que los clubes son toda gente pudiente y cada jugador vive en una casa en Puerto Madero. Pero en su mayoría el plantel de River son chicos jóvenes que viven con sus padres en barrios del Gran Buenos Aires y su única preocupación es que si se contagian pueden contagiar a sus padres. Son ellos los que no quieren arriesgarse y tienen razón”.
Para cerrar, volvió a resaltar la sabiduría de Marcelo a la hora de charlar un tema importante en un momento más que delicado del país. “Me quedó grabado lo que me dijo Gallardo, no es un problema de los clubes, que seguramente tendrán sus intereses porque el fútbol es un negocio que mueve dinero, pero hay que ponerse en la cabeza y en el cuerpo de ese jugador que tiene que volver a su casa y vivir con sus padres, con esos miedos encima”, concluyó el presidente.