Así como Foster Gillett dejó en banda a Valentín Gómez, quien finalmente no jugará en el Udinese, también abandonó la negociación por Rodrigo Villagra, dejando al volante en una situación incierta. Con la chance de ir al Santos de Brasil caída y con su futuro en el aire, el mediocampista que todavía pertenece a River busca un destino con urgencia.
En medio de esa incertidumbre, una opción inesperada aparece en el horizonte: Vasco da Gama. Con pocas alternativas en el mercado, Villagra podría encontrar en Brasil su próximo destino ya que el Gigante de Colina lo considera una opción en la última semana del libro de pases.

Villagra interesa en el fútbol brasileño.
A solo días del cierre de la primera ventana de transferencias en Brasil, el periodista Sebastián Srur confirmó que hay un fuerte interés del Vasco por Villagra. Desde River aguardan una oferta formal para avanzar en las negociaciones.

ver también
Ex River: Fabrizio Angileri es refuerzo del Corinthians y será dirigido por Ramón Díaz

ver también
Después del descanso, el complicado arranque de marzo que tendrá River
El volante, que se entrena por su cuenta, tiene claro que su intención es irse del Millonario. Pese a todo lo ocurrido, mantiene su postura firme y, por esta razón, todavía no se reincorporó a los entrenamientos con el plantel de Marcelo Gallardo.

Villagra aún es jugador de River y espera una resolución.
La condición indispensable para que se vaya Villagra
Más allá del interés de Vasco da Gama, hay un punto determinante en la posible negociación: River solo aceptará una venta definitiva. Con el cupo de seis jugadores cedidos en el exterior completo, el Millonario ya no puede realizar más préstamos por normativa FIFA, por lo que cualquier salida de Villagra deberá ser mediante una transferencia.
Esto podría representar un obstáculo en la operación, ya que Vasco da Gama no suele realizar pagos directos en este tipo de contrataciones. De hecho, recientemente Estudiantes de La Plata rechazó una oferta por Edwuin Cetré debido a que el esquema de pagos propuesto por los brasileños no convencía aunque los números sí.