Hace años que las irregularidades en torno a la AFA y la Liga Profesional son moneda corriente. Lamentablemente muchos dirigentes no se ponen en el lugar de los hinchas y las decisiones que se terminan tomando hacen del fútbol argentino un producto cada vez menos atractivo. No caben dudas que la falta de descensos entre 2019 y 2022 fue un descalabro que hizo que nuevamente haya 28 equipos en la Primera División, algo que no se ve en otra parte del mundo.

El pasado jueves se realizaron los sorteos tanto de la Liga Profesional –que a diferencia de los últimos dos años se jugará en el primer semestre del año y no en el segundo- y de la Copa de la Liga. Fue realmente difícil entender cómo se sorteó, de hecho en una reunión previa del Comité Ejecutivo ya se habían resuelto muchas cuestiones y solamente se sorteó la localía de la primera fecha.

Es decir que de sorteo tuvo poco ya que se sabía que River o Boca jugaría en la primera fecha contra Central Córdoba o Atlético Tucumán y lo que se sorteó fue quién jugaría contra quién y en qué cancha sería, el sorteo determinó que el Más Grande visite a Central Córdoba en Santiago del Estero el próximo 29 de enero.

Increíble pero real

La AFA pareciera no aprender de sus propios errores y ya que se sortearon solamente algunas cuestiones vinculadas a las localías, es increíble que nuevamente en la última fecha –tal como sucedió en la edición de 2022- vuelvan a enfrentarse River contra Racing y Boca contra Independiente. Eso sí, ahora se invertirán las localías. Parece una broma pero es real que la última fecha se vuelvan a enfrentar estos cuatro equipos con las suspicacias que se generaron en la última jornada de la Liga Profesional 2022.