Son pocos los jugadores que no necesitan de ese famoso tiempo de adaptación en River. Que llegan, se ponen la camiseta y juegan. Y en una semifinal de Copa Libertadores menos. Pero ilusionar de entrada con un gol o asistencia de crack siendo desconocido es lo que le generó una expectativa que luego no pudo alcanzar. Qué es de la vida de Tabaré Viudez.
El volante uruguayo fue una de las primeras apuestas de Marcelo Gallardo como DT del Millonario. El Muñeco lo conocía de su etapa en Nacional de Montevideo, y confió en él como uno de los refuerzos apuntados para buscar ser campeón de América después de casi 20 años. Fue así como en el mercado de pases de mediados de 2015, Viudez firmó en el Más Grande.
Después de semanas de negociación en las que River debió resolver la salida del charrúa del Kasimpasa turco, pero también la venta de Teo Gutiérrez al Sporting Lisboa, Viudez arribó en Argentina y rápidamente se sumó al plantel que viajó a Paraguay para la revancha de la semifinal contra Guaraní. Allí, el nacido en Montevideo ingresó a los 69 minutos de partido en lugar de Gonzalo Martínez, con el Millo perdiendo 0-1 pero con un global favorable de 2-1 y los paraguayos empujando en busca del empate.
10 minutos después, y en una de las primeras pelotas que tocó, Viudez cacheteó de tres dedos una bola que le quedó picando apenas pasando mitad de cancha para dejar solo mano a mano a Lucas Alario, que la pinchó ante la salida del arquero. El 1-1 le dio el pase a la final a River, que terminó siendo campeón de América. De hecho, Viudez jugó en la ida ante Tigres, pero se lesionó y no pudo estar en la vuelta, donde con un 3-0 en el Monumental el Más Grande levantó la tercera.
Tabaré Viudez, de su rápido desinfle en River a su presente en Uruguay
Cuatro días después de su asistencia en Paraguay, Taba convirtió su primer gol con el Manto Sagrado en el triunfo 3-1 sobre Colón de Santa Fe por el torneo local. Pintaba para cosa seria, pero luego de esos problemas físicos que sufrió nunca pudo terminar de asentarse. Sumó minutos en la Suruga Bank y en los dos partidos del Mundial de Clubes, pero en 2016 se terminó marchando del club, con un saldo de un tanto y cinco pases gol en 28 partidos.
Viudez volvió a Nacional, entrando como parte de pago por Iván Alonso, en donde jugó durante dos años y medio hasta quedar libre y desembarcar en Olimpia de Paraguay. En ese momento River perdió el 50% que le quedaba de su pase. Allí ganó dos títulos, pero en octubre del 2020 regresó al fútbol de su país para jugar en Defensor Sporting, Rentistas y Cerro.Desde mediados de 2023 se desempeña en Montevideo Wanderers, club en el que supo jugar Enzo Francescoli, y donde acumula 35 partidos, con tres goles y seis asistencias.