Paulo Díaz todavía no llegó a cumplir una semana de rehabilitación y ya dejó una señal de ilusión de cara al superclásico del próximo domingo contra Boca en el Estadio Monumental. El chileno está transitando el sexto día de recuperación de la distensión leve que sufrió en el biceps femoral en el partido contra Independiente.

Dependiendo del grado de la lesión y también de la regeneración de los tejidos de cada cuerpo humano, las distensiones suelen durar, como mínimo 14 días, pero hay sobrados casos de jugadores que tuvieron recuperaciones calificadas como “milagrosas” antes de partidos importantes.

La zaga central fue un dolor de cabeza para Martín Demichelis al principio de la temporada y con el correr de los partidos encontró a la dupla ideal: González Pirez y Paulo Díaz, relegando a Mammana al banco de suplentes. Ahora es muy probable que el DT tenga que recurirr al ex Zenit de Rusia para el partido más importante del semestre, pero ojo…

La buena noticia que dejó Paulo Díaz en el entrenamiento

Con la mente puesta en Fluminense, River se entrenó este domingo por la mañana en el River Camp con Paulo Díaz diferenciado por obvias razones. El chileno pasó una gran parte de la mañana haciendo kinesiología, pero encendió una llama de ilusión luego de realizar pequeños movimientos livianos en el campo de juego.

Esta semana será clave para definir si podrá estar frente a Boca. Todo indica que no, ya que Demichelis jamás lo usaría sin estar al 100% desde lo físico, pero todavía nadie se anima a descartarlo y la evolución día a día marcará su posibilidad de decir presente (o no) el domingo por la tarde en Nuñez.