La dura e inesperada derrota de River en el amistoso ante Independiente Rivadavia por 4 a 0 no pasó desapercibida, ni puertas adentro y mucho menos en los hinchas. Todos coinciden en que el Millonario no puede permitirse bajo ningún punto de vista dar esa imagen, pese a que haya sido un encuentro de preparación, y menos ante un rival muy menor en cuanto a jerarquía.

Originalmente, Martín Demichelis y su cuerpo técnico tenían planificado darles el fin de semana libre a los futbolistas, es decir sábado y domingo. A partir del pésimo resultado (y sumado en parte a que la semana previa había sido muy liviana en cuanto a prácticas debido a las lluvias), el DT determinó que se entrene los dos días.

Según reveló el periodista Gustavo Yarroch, hubo enojo en algunos futbolistas por esta decisión, ya que muchos tenían planificado pasar el fin de semana con sus respectivas familias y se vieron obligados a quedarse en Buenos Aires. El clima de entrenamiento, según cuentan desde River, fue muy bueno y sin pelea alguna, pero ciertos jugadores habrían sentido molestia.

Demichelis tomó una fuerte decisión tras la derrota en Mendoza y dio un golpe de autoridad.

Demichelis tomó una fuerte decisión tras la derrota en Mendoza y dio un golpe de autoridad.

En esa línea, Germán García Grova, periodista de Radio La Red, contó que un futbolista que fue titular ante Independiente Rivadavia (sin revelar su identidad) le confesó que tenía pasajes para irse de viaje entre sábado y domingo y que la decisión de retomar los entrenamientos fue “correcta” porque no tenía ganas de salir a ningún lado por lo mal que había jugado.

No fue una derrota más para el Más Grande, que se prepara para la recta final de la Copa de la Liga y el debut en Copa Libertadores. Demichelis se fue sin hablar del Estadio Malvinas Argentinas y seguramente hizo una fuerte autocrítica interna por el rendimiento de los suyos en el campo de juego. Obligado a levantar, él y los jugadores…