River y Boca no se sacaron ventajas en el superclásico de Reserva. El partido dejó algunas emociones, un gol por lado, algunos encontronazos y algo de pierna fuerte. El destinatario de la mayoría de esas patadas fue Claudio Echeverri, que para este encuentro bajó a entrenador unos días con el equipo de Marcelo Escudero y volvió a sumar minutos luego de varios partidos sin poder ingresar en Primera. Su última aparición había sido en el amistoso contra Universidad Católica, en San Nicolás.
La presencia de Claudio Echerri en el superclásico se llevó todas las miradas. Especialmente de los hinchas de River, que esperaban con ansias la participación del Diablito. Las tribunas del predio de Ezeiza rebalsaron al enterarse que iba a ser el portador de la camiseta número 10. Y el chaqueño no defraudó, dentro de lo que fue un superclásico parejo, peleado, por momentos demasiado trabado e impreciso.
El Diablito se hizo cargo de la conducción y también de la pelota parada. Y fue así que pocos segundos antes del descanso, el Millonario llegó a la igualdad gracias a un centro preciso de Claudio, que cayó en la cabeza de Enzo Rubio, en el corazón del área. El defensor del Más Grande puso la pelota contra un palo y estableció la igualdad que se iba a mantener hasta el final del partido. Luego de recibir varias faltas fuertes y a poco del final, Pichi Escudero decidió reemplazar a Claudio y se llevó el aplauso de los hinchas de River que se hicieron presentes.
El llamativo mensaje de Claudio en las redes sociales
El Diablito Echeverri no brindó testimonios con los medios, pero sí utilizó su cuenta de Instagram para compartir una imagen del superclásico y para dejar un sugestivo mensaje: “Sumando minutos desde donde toque. Y siempre a dar lo mejor con esta camiseta”. El chaqueño necesita más participación, pide minutos a gritos y el River-Boca de Reserva sirvió para llegar a los próximos partidos con algo más de rodaje.
