El goleador se estrenó como titular en el torneo, abrió el partido con un movimiento típico de goleador y llegó a los cinco en el campeonato. Un rendimiento para no salir.
Hacía mucho que River no tenía un delantero de estas características y de esta jerarquía. Ya lo había demostrado en partidos anteriores y esta tarde dio una prueba más. David Trezeguet apareció cuando el equipo más lo necesitaba y su gol de cabeza sirvió para marcar el rumbo.
El goleador metió un cabezazo genial que dio en el travesaño y, sin perder la concentración, enseguida volvió a poner la cabeza en el rebote y salió a gritarlo de cara a los hinchas, que le regalaron una merecida ovación cuando dejó la cancha, en el segundo tiempo.
Trezeguet llegó a su quinto gol y respondió con creces, una vez más, a la confianza de Matías Almeyda, quien lo puso como titular por primera vez en el certamen, a pesar de que ya había estado desde el inicio contra Sportivo Belgrano, por la Copa Argentina.
De la práctica a los puntos
En la semana, Lucas Ocampos se quedó después de hora en los entrenamientos para practicar centros con la zurda, su pierna menos hábil, y el recepto de los mismos había sido nada menos que Trezeguet. Esta tarde, el trabajo dio sus frutos.



