Marcelo Gallardo llamó a Leonardo Ponzio para que ingrese a los 33 minutos del segundo tiempo, de inmediato el Madre de Ciudades explotó y ovacionó a su capitán. El León ingresó y de inmediato recibió de Franco Armani la cinta de capitán, es que si el volante central está en cancha no hay otro que pueda llevar esa cinta. Ponzio es un referente absoluto, un ídolo que se ganó un lugar en las páginas doradas de la historia de River a base de sacrificio, liderazgo y títulos.
El Millonario venció a Colón en Santiago del Estero y cerró un 2021 dando una vuelta olímpica, una más en lo personal para Leonardo Ponzio que de esta manera alcanzó su título número 17 con el Manto Sagrado y se convirtió en el futbolista con más cantidad de campeonatos ganados con la camiseta de River. Hay que recordar que el pasado 5 de diciembre el León jugó su último partido en el Monumental y tanto sus compañeros como el cuerpo técnico y los hinchas lo ovacionaron de pie, como corresponde.
Una vez finalizado el partido y en medio de los festejos tanto los hinchas desde las tribunas comenzaron a corear el apellido del ídolo, sus compañeros lo agarraron y comenzaron a tirarlo al aire, minutos más tarde todos comenzaron a cantar:“vení vení, cantá conmigo que un amigo vas a encontrar, que de la mano de Leo Ponzio todos la vuelta vamos a dar”. Un broche de oro para una carrera extraordinaria. Se retira el ídolo y se lo va a extrañar mucho.
La organización le preparó una fiesta a Ponzio: se proyectó un video en las pantallas gigantes del estadio, su esposa e hija le dieron un cuadro suyo junto a un león, el flamante presidente –Jorge Brito- le entregó una camiseta con el número 17 por la cantidad de títulos. Sus compañeros lo abrazaron y los hinchas cantaron bien fuerte: “Olé le, ola la, Ponzio es de River, de River no se va”.
La palabra del capitán, entre lágrimas
“Mi mamá y mi papá también en la tribuna, gracias a ustedes también. Lo vengo diciendo hace días, no me gusta ser el centro de atención, todavía no caí de lo que hice con esta camiseta. Gracias a mis compañeros, al cuerpo técnico, gracias Marcelo. Vine de otro lado, me adoptaron de la mejor manera y creo que me brindé al máximo, sigo insistiendo que todavía no caí, mañana por ahí me cae todo de golpe. Me quedo con la sensación de que me voy con muchas ganas de poder seguir en esta casa, gracias por todo”, dijo el ídolo para los hinchas presentes en el estadio.