River está metido de lleno en el superclásico del próximo domingo frente a Boca en La Bombonera y semejante partido lo tiene ocupado y preocupado a Marcelo Gallardo. Ocupado siempre, preocupado por la lesión de Pablo Solari, el mejor jugador del equipo (o por lo menos el más determinante) desde hace varios partidos. El Pibe se desgarró el cuadrado femoral (músculo inferior de la región de los glúteos) en el partido con Barracas y es casi un hecho que no juega este fin de semana.

A partir de ahí, al Muñeco se le presentan varias opciones a la hora de armar el once inicial, pero todas de características distintas y algunas también conllevarían un cambio de esquema. Los candidatos son cuatro, algunos con más chances que otros, pero cuatro al fín: Santiago Simón, Matías Suárez, Esequiel Barco y Miguel Borja.

 

Analizando exhaustívamente cada posible cambio y remarcando que Palavecino sería cambio cantado por Juanfer Quintero por la dinámica que imagina el DT durante el partido, el ingreso de Simón haría jugar a River como en la primera parte del campeonato: 4-1-4-1, con Enzo Pérez de cinco, la línea de volantes por delante con De la Cruz, Aliendro, Pala y Simón, tirado de volante por derecha.

De ser titular indiscutible a ser suplente sin quejas, así fueron las últimas semanas de Simón, que tiene un estilo mucho menos ofensivo que el de Solari y podría servirle al equipo para darle un poco más de marca y contención en el mediocampo y también para tapar la salida del lateral izquierdo de Boca (Fabra), que suele ser muy utilizado para iniciar los ataques.

 

Luego aparece la chance más factible y que más consenso genera en los hinchas: Matías Suárez. Cada vez que juega, el 7 bravo es decisivo y seguramente en su cabeza esté deseando hace rato un partido de semejante mangitud para demostrar que sigue vigente. Podría formar una dupla muy interesante de ataque junto con Beltrán, que se perfila para ser el nueve titular.

¿Barco? Podría ser también, si Gallardo apela a la explosión y el desequilibrio. No juegan por el mismo costado y sus presentes no son iguales, pero Barco es el jugador más similar a Pablo Solari en cuanto a características y por eso su ingreso es una posibilidad que está sobre la mesa, aunque correría con cierta desventaja respecto a los otros candidatos.

 

Por último aparece el Colibrí, que viene de embocarla frente a Barracas y casi todo lo que toca lo hace gol. Le cuestan los partidos en los que River tiene que proponer y generar juego con circulación de pelota y movimientos entre líneas, pero se siente cómodo cuando hay que estacionarse en el área y patear al arco sin titubear. Pasando en limpio, Borja últimamente rindió mejor entrando en los segundos tiempos en trámites específicos de un partido y no jugando desde el arranque, pero es una tentación el doble nueve y será Gallardo quien lo defina...

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