El hincha de River quiere tanto a Nacho Fernández por varios motivos, uno de ellos fue lo bien que jugó siempre en los partidos importantes. Y si hubo un encuentro trascendental en la historia del Más Grande fue la final de la Copa Libertadores contra Boca, más que nada el partido de vuelta que se jugó en el Santiago Bernabéu. En aquella noche madrileña Nacho brilló, fue determinante para obtener la victoria y los fanáticos del Más Grande siempre se lo reconocieron. Además de ese partido hubo una innumerable cantidad de situaciones por las que Nacho se hizo querer: su humildad, su compromiso con el equipo y fundamentalmente que con su clase supo representar a la perfección el estilo histórico del club.

“El segundo tiempo en Madrid lo tengo muy arriba en mi consideración”, recordó Nacho Fernández en la pantalla de TyC Sports. El Cerebro fue consultado respecto a cómo vivió el post partido en los camarines: “En el vestuario del Bernabéu no podía parar de llorar, agarré el celular y empecé a leer los mensajes de mis viejos, mis hermanos, amigos hinchas de Boca que me felicitaban y no podía parar”.

“Uno no se da cuenta en el momento que entró en la historia grande de River, hoy que estoy en otro club, sí. Pero estando en River hoy ganaste, mañana tenés que volver a ganar y mañana tenés que volver a ganar. La gente te hace notar lo de la final de Madrid y están súper agradecidos y va a ser eterna para toda la vida”, aseguró el talentoso volante que actualmente se encuentra en el Atlético Mineiro, próximo rival del Millonario en los cuartos de final de la Copa Libertadores.

La intensidad del Más Grande

El volante también se refirió a lo que se vivió en el Más Grande, y se sigue viviendo en la actualidad y es la mentalidad ganadora que tiene tanto el club en general, como el cuerpo técnico en particular y aseguró que habiendo salido, puede valorar más los éxitos conseguidos: “En River hay que ganar siempre, es la exigencia que te pide el club y el técnico. Ahora que estoy afuera se disfruta más lo que se ganó”.