Enzo Fernández demostró ser un futbolista impresionante. Juega con una tranquilidad que no es propia de un chico de apenas 21 años, se puede desempeñar en cualquier puesto de la mitad de la cancha, es inteligente para marcar, tiene muy buen pase, un excelente remate de media y larga distancia, además cuando se suelta suele aparecer por sorpresa dentro del área. Es un jugador total: defiende y ataca de gran manera y tiene una inteligencia para estar siempre en el lugar indicado que realmente es asombrosa.

Su Mundial fue maravilloso, fue uno de los mejores de la Selección Argentina que se quedó con la Copa del Mundo en Qatar. Comenzó como suplente en los dos primeros partidos –aunque ingresó en el segundo tiempo- y ya desde la tercera fecha y hasta la final se afianzó como titular y lo hizo muy bien. De hecho la FIFA lo eligió como el mejor jugador Joven.

Su excelente rendimiento en su primer semestre en el Benfica ya había generado el interés de algunos clubes, pero tras el Mundial eso se intensificó. Los portugueses no quieren saber nada con venderlo y por tal motivo el Manchester United estaría dispuesto a pagar los 120 millones de euros de la cláusula de salida.

River y una estrategia acertada

El mercado no es igual en todas partes del mundo. De hecho increíblemente los brasileños suelen vender mucho más caro que los argentinos y ni hablar de los valores que se pagan entre clubes europeos. Teniendo en cuenta ese detalle no menor, River decidió vender el 75% del pase de Enzo Fernández y quedarse con un 25% restante pensando en una futura venta. De concretarse la venta de Enzo al Manchester United, el Millonario recibirá 30 millones de euros, que se sumarán a los 18 que ya pagó Benfica.