Enzo Pérez llegó al club de sus amores para cumplir su sueño a comienzos de 2017. Desde entonces se ganó un lugar en el equipo titular, se convirtió en un jugador imprescindible y su alto rendimiento –sostenido en el tiempo- lo ubican como uno de los mejores jugadores de todo el ciclo de Marcelo Gallardo y hay que destacar que no es tarea sencilla, ya que desde que el Muñeco se sentó en el banco del Millonario allá por mediados de 2014 pasaron futbolista de enorme jerarquía, pero Enzo se convirtió en el termómetro de un equipo y es muy difícil encontrar un partido en el que no haya jugado bien.

El mendocino pasó por diversas posiciones a lo largo de su carrera: en Godoy Cruz, Estudiantes y Benfica se destacó como un clásico volante por derecha con llegada, prácticamente jugaba como extremo, de hecho en la Selección Argentina también lo hizo en esa posición a lo largo de muchos años y siempre lo hizo en un gran nivel. Pero en Valencia lo fueron llevando hacia la zona central de la cancha y terminó jugando como volante central y de hecho en sus primeros partidos en River jugó como doble cinco al lado de Ponzio.

Ya en 2018 el Muñeco lo utilizó como único volante central y su nivel fue superlativo, es opción de primer pase para salir con la pelota limpia, cuando tiene que meterse entre los centrales lo hace, cuando puede subir unos metros y aportar el ataque también lo hace, Enzo es un jugador total que pue cubrir varias zonas del terreno de juego y lo hace bien. Es cierto que de él no se espera que convierta goles, está más bien para evitar que el equipo rival los haga y también para conectar a la defensa con el ataque, pero ante Aldosivi jugó unos metros más adelantado –Zuculini cubrió la zona de volante central- y se anotó en la red con un certero cabezazo tras un gran centro de Milton Casco.

Los otros cuatro goles del mendocino con el Manto Sagrado

El primer tanto de Enzo con la camiseta del Más Grande fue en uno de sus primeros partidos con el Manto Sagrado y fue por la Copa Argentina 2017 ante Instituto, el equipo de Marcelo Gallardo enfrentó a la Gloria en Mar del Plata y le ganó por 4 a 1, Enzo convirtió el segundo de aquella noche y fue un golazo desde afuera del área, como no podía ser de otra manera se besó el escudo. Los siguientes dos fueron en la goleada histórica por 8 a 0 ante Jorge Wilstermann por los cuartos de la Libertadores de 2017, el primero fue a los 35 minutos del primer tiempo y fue el de la tranquilidad, el 4 a 0 –River había caído 3 a 0 en Cochabamba- y el segundo de su cuenta personal fue un tremendo golazo de área a área y fue para sentenciar el marcador. El último había sido en abril de 2019 ante Aldosivi en Mar del Plata y también de cabeza.