Fue una nueva revolución de los hinchas de River. Tal como sucedió en Osaka, Tokio y Madrid, miles de hinchas de River se autoconvocaron para compartir la pasión y el sentimiento a través de canciones, aliento, banderas y todo el entusiasmo que representa la víspera de una nueva final de Copa Libertadores. Aunque los hinchas de Flamengo llegaron en forma masiva, quienes ayer se hicieron sentir en Lima fueron los del Más Grande.

Los ciudadanos locales no podían creer semejante manifestación en el corazón del bonito barrio Miraflores. Entre la tarde y la noche se vivió una auténtica locura. Las melodías de River se repitieron una y otra vez, incluso acompañadas por bombos. Hubo un repertorio amplio que incluyó muchas banderas colgadas (las más destacadas fueron una enorme con la leyenda “Que la gente crea porque tiene con qué creer”, “Filial Lima”, “Filial Miami” y dos con Marcelo Gallardo), bengalas de humo y fuegos artificiales.

En paz, los hinchas de River hicieron una fiesta. Lejos de romperlo o saquearlo como tantas veces ocurrió con otra parcialidad, los simpatizantes coparon el famoso local de comidas rápidas para sacar fotos y filmar desde ahí. El más ingenioso directamente empleó un drone para registrar ese espectáculo que únicamente pueden ofrecer los fanáticos del fútbol.

Entre cerveza y fernet, aprovechando el expendio de los vendedores ambulantes, quienes también exhibieron merchandising, los hinchas de River provenientes de Argentina y otras partes del planeta vistieron de rojo y blanco al Parque Kennedy. Alrededor de de seis horas duró el apoyo gigante hacia los colores mientras los peruanos tomaban imágenes con sus respectivos celulares ante un show único. Una auténtica revolución de pasión con el sueño en común: ganar la Copa Libertadores. Que la gente crea.