En Inglaterra dicen que el ex-River no se moverá del Tottenham Hotspur; en Italia están convencidos de que Inter y Napoli lucharán para contratarlo. Él, en tanto, entrena en River.
Tras tener dos muy buenas temporadas en la Roma (especialmente la última), Erik Lamela fue vendido el año pasado al Tottenham inglés. Pero en Londres no pudo demostrar todo su valor, a causa de algunas lesiones que le sacaron continuidad, y el cambio de entrenador a mitad de la temporada.
Mientras Erik, el Inter y el Napoli siguen confiando en el talento de Lamela, y pretenden contar con él la próxima temporada.
El equipo nerazzurro, que lo buscó en junio de 2011, antes de que firmara con la Roma, vuelve a la carga, y pretende incluir a Fredy Guarín como parte de pago, junto a una suma de dinero (el colombiano está valuado en 18 millones de euros, mientras que el Tottenham pretende recibir no menos de 25 por el argentino).
El equipo donde juega Gonzalo Higuaín, en cambio, quiere negociar un préstamo por un año con opción de compra, que el conjunto londinense no estaría dispuesto a aceptar.
Sin embargo, los Spurs cuentan con un nuevo entrenador, el argentino Mauricio Pochettino, quien no estaría dispuesto a aceptar la cesión de Lamela. El mercado de pases europeo acaba de empezar, y debido al Mundial, recién entrará en la etapa más caliente una vez finalizado el Mundial de Brasil. Sin embargo, la novela por el pase del ex-River promete tener varios capítulos.
