Si bien su nivel fue de menor a mayor, River volvió a dilapidar todas las chances de gol que tuvo ante Independiente Santa Fe en Paraguay y no pasó del 0 a 0. Marcelo Gallardo alineó a un equipo alternativo, con varias titularidades que hace tiempo no se daban, y una de ellas fue la de Jorge Carrascal, quien venía ocupando un lugar en el banco de suplentes y tuvo la oportunidad de revertir su imagen jugando desde el arranque, algo que no ocurrió.

En la semana, a Gallardo le preguntaron en conferencia de prensa por el nivel que Carrascal venía mostrando y el entrenador expresó que "necesita respuestas de los futbolistas para sostenerse en el plantel y también para pedir jugar". El Muñeco le dio la posibilidad al colombiano de cambiar esa imagen irregular que venía mostrando pero el nivel del volante ofensivo no fue el esperado.

Durante el primer tiempo, al ex Sevilla se lo vio bastante, cuando le tocó hacerse cargo de la pelota, más suelto y con libertad en el campo pero sus apariciones fueron muy esporádicas. Tuvo algunas conexiones interesantes con Paradela e intentó mucho el desequilibrio y la gambeta en el 1v1 pero no pudo imponerse demasiado

Para el complemento, el colombiano tuvo todavía mas contactó con la pelota. Fue siempre opción de pase y buscó -y encontró- los espacios entre los defensores y volantes del rival. Lamentablemente, se equivocó en los metros finales y volvió a mostrar un juego irregular. A los 70 minutos quedó mano a mano con el arquero Castellanos y en vez de definir de zurda, buscó el penal y se arrojó en el área sin que el defensor de Santa Fe lo hubiese tocado. El árbitro Herrera no compró y Carrascal volvió a quedar en deuda con el Muñeco.