Esequiel Barco llegó en el último mercado de pases como una de las grandes promesas y en sus primeras participaciones no decepcionó en lo absoluto. Mostró condiciones, voluntad, tiró algunos lujos y ya hizo un golazo. Es un jugador muy joven todavía y tiene que buscar regularidad, poder sostener su gran nivel en la mayor cantidad de minutos posibles durante un partido pero claro está que va camino a eso.

Es un jugador exquisito, gambeteador, que va para adelante y eso es fundamental para Marcelo Gallardo que suele pregonar un fútbol vertical. En el superclásico del pasado 20 de marzo fue reemplazado a los 15 minutos del segundo tiempo por una molestia muscular, luego tuvo dos semanas para recuperarse y llegar de la mejor manera al partido contra Defensa y Justicia pero al no estar al 100% -igualmente concentró- el Muñeco decidió no arriesgarlo y por eso ante el Halcón ni siquiera fue al banco de suplentes.

Fue una medida para preservar su físico y que llegue de la mejor manera a la dura seguidilla de partidos que se le vendrán a River en las próximas siete semanas, porque Barco solamente tenía una fatiga muscular, pero exigirlo podrí derivar en un desgarro y de esa manera se perdería tres semanas, en la que se disputarán seis partidos. Es por eso que el volante estará disponible para el debut en la Copa Libertadores del próximo miércoles ante Alianza Lima en condición de visitante.

¿Romero llega también al debut?

El caso del delantero es similar al de Barco, la semana siguiente al superclásico presentó una molestia en su tobillo izquierdo producto de una traumatismo, nada para preocuparse y por los mismos motivos el Muñeco decidió no exigir a Romero, sabe que necesitará de él en los próximos partidos y es por eso que no estuvo ante Defensa y Justicia y sí viajará a Lima para enfrentar a Alianza Lima por la primera jornada del Grupo F del certamen más importante del continente.