En las horas previas al duelo decisivo de la Libertadores, Crespo destacó el rol de los fanáticos en la consagración de 1996. Además, el exdelantero del Millonario analizó el presente de Cavenaghi.

Indudablemente, ante tanta expectativa por la final ante Tigres, el pueblo millonario comienza a recordar las glorias que supieron conquistar América. Uno de ellos fue Hernán Crespo. El exdelantero de La Banda fue el autor de los dos goles que le permitieron a River consagrarse campeón de la Copa Libertadores de 1996.

Mientras aguarda por el duelo decisivo, Crespo analizó aquella noche mágica en la que logró coronarse en el certamen continental: “Fue un sueño hecho realidad. Yo tenía once años cuando River ganó la Libertadores del ’86. Tuve la posibilidad de estar en ese vestuario porque era amigo del hijo del Beto Alonso. La viví desde adentro. Presenciar eso genera el deseo de vivirlo como protagonista”.

“No hay palabras para describir lo que es ganar la Libertadores. El primer gol que metí no lo hice yo, lo hizo la gente. Yo no veo la pelota por la cantidad de papelitos que había. Por eso digo que el hincha tiene un rol importante. Esta oportunidad que tienen los jugadores de River no se da todos los días. Tienen la posibilidad de escribir la historia”, agregó el actual entrenador de Módena, de Italia.

Luego, el jugador surgido en las Inferiores del Más Grande destacó el presente de Cavenaghi: “La sensación que da Fernando es la de sentimiento. El hincha de River se siente identificado con él por todo lo que hizo. Estar en los paños de él es complicado, porque tiene que canalizar toda su energía en alcanzar el objetivo. Depende el carácter de cada uno, a veces te puede llevar en contra. Fernando lo tiene que disfrutar como yo lo hice en el 96. No recuerdo un recibimiento de semejante magnitud. Hay que sentirse orgulloso de lo que van a disfrutar”.

En cuanto a su formación con el manto sagrado, Crespo aseguró: “River me formó a 360 grados, tanto lo positivo como lo negativo. Recuerdo todos esos momentos en los que estuve relegado, cuando jugaba en juveniles. River fue formativo en todos los aspectos. Para mí fue importante representar a un club tan grande desde tan joven”.

“River tiene que ganar donde juegue y eso me formó el carácter. Hacer las Inferiores en el club, con las buenas vivencias y las malas, es un gran motivo de orgullo. Esta satisfacción que me generó haberme formado en River, me ayudó a tener una trayectoria exitosa. Siempre tuve que convencer gente, tanto dirigentes como técnicos y demostrarles que estaban equivocados. Tuve mi recompensa”, sostuvo, en diálogo con Central Fox.

Además, el exatacante de La Banda se mostró ilusionado con ser el DT del Millonario, en un futuro: “Lógicamente tengo el deseo de dirigir a River, pero no es el momento. Marcelo está haciendo un trabajo extraordinario. Cuando charlé con Enzo y D’Onofrio me di cuenta que la casa estaba en orden. No es una casualidad, cuando las cosas se hacen bien genera buenos resultados. Hay que aprovechar este momento. Después el tiempo dirá si llegaré a ser entrenador de River”.

Finalmente, Crespo le envió un mensaje de apoyo al plantel dirigido por Gallardo: “Es muy simple. Antes de esta final hay un antes y un después. Todo lo que vendrá después de este duelo será una consecuencia del resultado. Tienen que disfrutar. Si River se aferra a lo que viene haciendo, estoy convencido que va por buen camino”.

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+ Un Torito internacional.

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