Tuvo la chance de debutar con la camiseta de River con apenas 17 años. Cumplió el sueño de jugar con Ariel Ortega, su gran ídolo, pero una persona que con el tiempo se transformó en uno de sus mejores amigos en aquel plantel que comandaba Néstor Gorosito, allá por el 2009. Daniel Villalva tuvo que bancarse los años más difíciles del club de Núñez, tanto en lo deportivo como en lo institucional. Por eso, cuando emigró hacia el Veracruz a mediados del 2014, justo antes de la llegada de Marcelo Gallardo como nuevo entrenador, sintió que le quedó una cuenta pendiente con la camiseta del Más Grande.
Pasaron ocho años desde aquella última función del Keko con la banda roja en el pecho. Fue justamente con un triunfo sobre Boca en un superclásico amistoso disputado en México DF, el día que también se despidió de River el Lobo Ledesma. Villalva marcó el único tanto del equipo dirigido por Gustavo Zapata y en los penales ganó el Más Grande. Desde aquel entonces hasta la fecha, vistió la camiseta de dos clubes mexicanos (Veracruz y Querétaro), uno de Brasil (Goiás) y otro Paraguay (Guaraní), pero hasta aquí no se le había dado la chance de regresar al fútbol argentino.
Hoy con el pase en su poder, el Keko Villalva recibió varias propuestas y terminó eligiendo la de Ferro Carril Oeste. El conjunto de Caballito presentó en sus redes oficiales la llegada del delantero de 30 años oriundo de Caá Catí, Corrientes, que firmó un contrato hasta el 31 de diciembre de 2023. El jugador mimado por el Burrito Ortega ahora afrontará un nuevo desafío: conseguir la vuelta de un club histórico del fútbol argentino a la Primera División.
