En el último mercado de pases, River se desprendió de cuatro delanteros, dejando al plantel con una escasez importante en la ofensiva.

De la mano de Marcelo Gallardo, el Millonario pelea por todos los frentes. El equipo sueña con lograr el bicampeonato en la Copa Sudamericana y, por qué no, consagrarse en el ámbito local. Pero, sin dudas, el objetivo más importante del 2015 es el Mundial de Clubes, que se disputará en diciembre, en Japón.

De todas formas, luego de un mercado de pases más que movido, el plantel quedó algo reducido, especialmente en base a los delanteros. ¿Por qué? En los últimos meses, River se desprendió de Fernando Cavenaghi, Teo Gutiérrez, Giovanni Simeone, Juan Cruz Kaprof, Federico Andrada, Lucas Boyé -los cuatro, a préstamo-, seis variantes en el ataque para el técnico de La Banda.

Los juveniles emigraron a préstamo a conjuntos argentinos en busca de continuidad dentro del campo de juego. Distinto es el caso del colombiano, que priorizó la propuesta económica de Sporting de Lisboa para garantizar el futuro de su familia. Por su parte, el Torito sintió que su historia con el manto sagrado llegó a su fin y, por ende, decidió dar un paso al costado y viajó a Chipre para sumarse a APOEL Nicosia.

Actualmente, los jugadores que se desempeñan como atacantes en el Millonario son: Lucas Alario, Rodrigo Mora, Javier Saviola y Franco López. También se encuentran Tabaré Viudez y Sebastián Driussi, que bien pueden ocupar un puesto en el medio campo del Más Grande. Esta escasez obliga a la dirigencia de River a comenzar a evaluar distintas posibilidades ofensivas para el 2016.

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